La magia entre versos

Natural #4

                             Vida
                  Entre susurros del día
                  Junto praderas y ríos
                  Creciendo como judíos
                  Que devuelven la armonía.

                 Unas gotas de esperanza
                 Movidas por plenitud
                 Anticipan gratitud
                 A las reinas de la alianza.

                Entre batallas de verde
                Sumergidos al ayer
                Sin fronteras a crecer
                Ante su madre remuerde.

               Con el nacer de carreras
               Desarrollan el sentido
               Entre todos su quejido
               Anunciando primaveras.

              Abominables acciones
             Esperando terminar
             Con su fuerza a de cavar
             La historia en generaciones.

            Con el canto de colores
            Invocando la alegría
            Estructura no sombría
            Que se aferra de las flores.

           Fragmentos de una vida en ilusión
Nacemos y pasamos a formar parte de una vida racional, nos desarrollamos, nos alimentamos como todo ser viviente de este mundo, al llegar a un punto en la vida aparecen razones, fuerzas, e instintos que no sabíamos que existían, llega el momento en que pasamos a formar parte del día a día de otras personas, ya sea en juegos, trabajo, u otra actividad personal. Creemos que somos capaces de ser tan independientes que nos enfrentamos a la vida de diversas maneras, como mismo las aves abandonan el nido lo hacemos de nuestros hogares, buscamos un rumbo en la vida, aventuras. Llega el momento que decidimos formar nuestra propia familia de acuerdo con los gustos de cada persona, comenzamos a sentir preocupaciones, sentimos ese pesar en el pecho, ese nudo en la garganta que nos hace recordar que somos personas y que nos importa el bienestar de otros, pasa el tiempo y lo que ayer nos tomaba por sorpresa ya no lo hace, comenzamos a pensar en nuestros actos, en lo que los demás puedan decir de ellos, queremos dar una imagen a nuestra vida, sentimientos, algo real, que haga sentir a nuestros frutos el orgullo que su árbol creador merece, olvidamos cosas insignificantes como la competencia, en muchos sigue el mal, la envidia, ese sentido de poder incontrolado sobre las cosas, pero en otros, eso que ayer le llamábamos experiencias, un mal día, se convierte en sabiduría para la vida, es ese saber que sirve para enseñar a otros, son esos tropiezos que podemos hacer que nuestros seres queridos eviten, aunque, cada quien en su vida tiene que saber marcar su camino por sus propios pasos. Con el pasar del tiempo la familia de muchos crece, no solo el pensar en frutos, sino, en los frutos que dieron ellos, pasamos de ser creados a creadores del que crea una nueva vida, pasamos a ser esa persona que apoya, que te aconseja, pero que no puede interferir en tus acciones, aunque sí hablarte de ellas. Y es ahí cuando el tiempo se está al acabar, cuando le tememos al no despertar, el miedo al qué habrá más allá de ese largo sueño, ahí es cuando nos damos cuenta que todos somos iguales, unos con mejores vidas que otros, pero en el sentido de la existencia, desde la más pequeña de las hormigas hasta el más de altos árboles valen lo mismo, una vida más, una esperanza para la continuidad de una especie, pero no nos damos cuenta de lo que tenemos delante, quemamos, matamos, masacramos especies para un bien propio, en vez de una especie avanzada, nos convertimos cada día en abominación, difundiendo el miedo, el terror, siendo crueles con aquellos que viven para crecer, para hacer que este mundo tenga un equilibrio, y que tan solo con una mala idea, una acción errónea todo eso puede acabar en destrucción, no solo en la vida animal,marina, terrestre, sino, en la de todos, una destrucción que abarca al hombre, ese sentido de poder que envenena sus mentes, hermanos que matan a hermanos, familias destrozadas por el poder, a eso es a lo que se le debe temer, no al ataque animal, ese es su instinto, pero el tuyo, el mío, el de todos los seres humanos es crear, unificar, y hacer que la vida en el planeta surja, salvar los bosques, mares, las tierras, terminar la guerra, ese es el verdadero propósito de nuestra vida, nos preparamos para salvar a los nuestros sin importar cuantos del otro bando puedan morir, tú le puedes tener a la muerte, tú tienes que vivir, pero esta es la pregunta:
¿Por qué ellos no pueden vivir  en paz?

Nota de autor:
Espero que les haya gustado la poesía y la reflexión, quiero que sepan, que si quieren que escriba algo de algún tema que les guste, o cualquier otra inquietud, pueden poner en comentarios o a mi cuenta. Gracias!!!

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