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veintisiete

Yoongi se reincorporó después de unos minutos, nunca hablaba de eso con nadie, solo la gente más cercana sabia de su pasado; se preguntaba si había hecho bien el decirle a Hoseok

Se alejó de los brazos de su contrario, sintiendo unos segundos después sus manos limpiando los rastros de lágrimas de sus mejillas, levantó su mirada y se sorprendió cuando observo los ojos de Hoseok aguados

— No llores, no te ves lindo así — Yoongi acarició levemente su mejilla, sintiendo el irreal tacto de nuevo, no entendía cual era la diferencia con los demás y Hoseok, pero si él se volvía la única persona en todo el mundo que podía tocarlo, lo mantendría en su vida el tiempo que le fuera posible — y esa es la historia, desde que eso pasó no dejo tocarme por nadie, recurrimos a terapia infantil y mi papá denunció a Jinsu, hoy en día sigue lamentando demasiado lo que ocurrió en esos días, siempre se culpa por ello.

Hoseok intento no verlo con tristeza, pero le dolía en lo más profundo de su corazón que Yoongi tuviera tal experiencia

— ¿Cómo se enteraron de lo que ocurrió?

— Cuando llegue a la casa de mi tio lo primero que hicieron fue llamar a mi papá, le mencionaron que me había desmayado y él llego lo más rápido posible. Cuando me desperté mi tía intento ayudarme a parar y rechacé su mano, estaba tan asustado y asqueado que termine por vomitar ahí mismo, nunca dude un segundo en contarle a mi papá lo que había pasado, entonces todo se desplomó en ese día.

Hoseok nunca pensó que alguien cercano pasará por algo así, quería ser un todo para Yoongi, ser su pañuelo de lagrimas, ese alguien en quien confiar, haría todo lo que estuviera a su alcance para que olvidará todos los malos momentos.

— Dejé de asistir a la escuela, los últimos años estudie en casa y tome terapias intensivas, cambié de terapeutas varias veces hasta que di con el consultorio de Jungkook, gracias a él pude entrar a la universidad en tercer semestre, me costó adaptarme al ambiente y fue un poco difícil en aquel momento, pero pude salir de ello eventualmente. Mi padre no volvió a conocer a nadie hasta hace dos años, hubo un tiempo en donde se disculpaba conmigo todos los días, yo nunca sentí ningún tipo de rencor hacía él, siempre le recordaba que no era su culpa y que solo quería lo mejor para mi. Debo presentártelo, de seguro le vas a caer bien.

— Me pondría muy nervioso si conociera a tu padre.

— Él no se parece a mi, en realidad es bastante cariñoso.

Ambos mantuvieron un poco el silencio, hasta que Yoongi volvió a hablar.

— Hoseok, quiero pedirte algo — Yoongi lo observó directamente a los ojos — no quiero que me mires con lastima, o que sientas que debes tratarme diferentes después de que te conté esto, en el pasado ya ocurrió y... tengo miedo de que se repita la misma historia.

— Yoongi, no puedo decirte que entiendo por lo que estás pasando, pero puedo ser tu lugar seguro, puedo ser esa persona que está incondicionalmente para ti — Hoseok extendió nuevamente su mano, pero esta vez agarró la mano de Yoongi — no me importar si te cuesta abrirte conmigo, mucho menos tu pasado, estoy totalmente dispuesto para ti, puedes usarme como tú quieras — dirigió la mano pálida de su contrario a su pecho, Yoongi podía sentir los fuertes latidos de su corazón — solo mantenme cerca, eso es lo único que yo te pido

Yoongi soltó un poco su mano y la dirigió al rostro de Hoseok, no tenía nada que temer.

— Me voy a mantener a tu lado hasta que alguno de los dos se aburra — Hoseok acercó lentamente su cuerpo al de Yoongi

— Primero me aburro de la danza — Yoongi sonrió incrédulo, observó los labios de Hoseok, sentía que era un buen momento para sentirse valiente y tomar iniciativa otra vez.