¿Enamorado de mi?

Las loca idea de Jess

Jess y yo salimos de la piscina y nos dirigimos a mi cuarto, mientras hablábamos Jess se acercó al baño y llenó el jacuzzi.

Me observé en el gran espejo del baño, detallando mi rostro, pensando en cómo iba a hacer para que Matt se fijara en mí y cayera en mi trampa. El reflejo de Jess me pasó desapercibido hasta que una sonrisa muy pícara se formó en su cara. - Tu déjamelo a mí - me dijo con chispas en los ojos, me asusté.

- No lo lograré - bajé la mirada hacia mis manos. - Jess, soy virgen y lo sabes, no sé nada de seducción.

-Barbie, eres la persona más dulce, inocente y sexy que conozco, tienes todas las de ganar y no te preocupes que dentro de poco serás una máquina de la seducción.- Jess estaba súper convencida de sus palabras, la abracé.

-Gracias por ser mi mejor amiga - le di un pequeño beso en la frente y ella me abrazó con más fuerza.

Con tanto abrazo y cariño no nos dimos cuanta que él jacuzzi se estaba desbordando y al sentirlo por los pies nos miramos abriendo los ojos como platos, comenzó a salir más y más agua con mucha espuma y no lográbamos alcanzar la llave para apagarla ya que nos resbalábamos a cada rato. El agua se filtró por mi cuarto y llegó a las escaleras, de repente se abrió la puerta del baño y un Matt asustado entró en el baño observando todo con horror.

- Voy a llamar al tío Jer - salió corriendo Jess que vio una oportunidad en la escena, pero antes de eso sentí como la única prenda que cubría mi cuerpo era bajada de un tirón que no me dio tiempo ni de pensar cuando vi la toalla en mis pies, una Jessica desaparecida de la habitación de baño y solo Matt parado delante de mi mirando todo con cautela, pegué un grito y me resbalé a los pies de Matt haciendo que cayera encima de mi, su robusto cuerpo cubría mi desnudez y sentirlo tan pegado a mi hizo que los colores se me subieran al rostro.

-No me mires- le dije en un primer arrebato.
Metió la mano por debajo de mi cintura y con la otra se apoyó al lado de mi rostro para levantarse y ayudarme al mismo tiempo, al despegarse de mi cuerpo bajó la mirada hacia mis senos que tenían espuma, lo que hizo que me pusiera más roja he incómoda aún.

-Para, para- le grité e instintivamente puse mis manos con jabón en sus ojos para evitar su mirada.

Cerró los ojos pegando gritos de dolor.
-Lo siento, perdón, no pretendía hacer eso- dije.
Salí de debajo de él para gatear hasta el grifo para mojar una toalla de agua limpia para ponerlo en sus ojos, al llegar hasta el, resbalé cayendo encima de él con mis piernas en su cintura y le tendí la toalla en la cara.

-¿Estás bien?- le pregunté.
-Si, ya no me duele- intentó aclarar la vista y me vio encima de su cuerpo. - Pero ahora tengo otro problema- dijo observándome de arriba a abajo anonadado.

-¿Puedes cerrar los ojos por favor?- dije frunciendo el ceño.
Me enrollé en la toalla mojada e intenté incorporarme para arreglar el problema de salida del agua.

Él me ayudó y solucionamos el cierre del grifo.

Mas tarde descubrí que Jess jamás fue a por mi padre, la encontré bebiendo un green smothie en la cocina leyendo una revista, casi la mato.
Las empleadas ya estaban secando y arreglándolo todo en mi baño y habitación.

-¿Qué tal nena, te acostaste con el?- me miró con curiosidad y una sonrisa picara ladina.

-No- dije enfadada y con los ojos entrecerrados. -No pienso acostarme con el, solo seducirlo, en eso quedamos no?-

-Bueno bueno, dudo que te resistas a ese semental, está mas bueno que el pan- la miro mientras pone su tipica cara de "tengo una idea".
Resoplo, me imagino lo que viene.

-¡Barbie, tengo una idea- Saltó de su asiento con emoción acercándose a mi con rapidez.

-No me digas- Espeté.

-Hagamos una fiesta, hoy, aquí, celebremos a lo grande tu mudanza- la miré.

-Pero si es jueves-

-Y que importa? Todos vienen a tus fiestas así sea lunes, a parte hoy se queda Matt en la casa, con lo cual asistirá a tu "pequeña" fiesta- siempre que Jess hacía un gesto entre comillas con los dedos significaba todo lo contrario.

-Hecho, tienes razón no tiene que ser un incordio vivir con Jeremy, puedo tener un poco de diversión- dije devolviéndole la sonrisa con complicidad.

-Pues armemos la fiesta- me abrazó y enseguida se puso con el movil a cuadrar todos los preparativos.