Mi primera decepción fue a eso de los 8 años cuando cursaba tercer grado de primaria, todas las tardes solía visitar a mi abuelita materna junto con mi hermana mayor y mi madre. Uno de mis mejores amigos se llamaba Mario, Mario era de ese tipo de personas las cuales podían mejorar tu día con tan solo una simple y bella sonrisa, y eso me facinaba de él. Mi infancia no fue perfecta, nisiquiera buena para ser honesta… pero tenía a Mario y varios amigos varones más. El punto esque mis demás amigos vivían algo lejos de mi y solo solía verlos en la escuela, pero Mario era diferente a todos y el hacía mi vida más interesante con nuestras locuras, nuestras aventuras, y más importante con nuestro mundo. La gente solía decir que él y yo terminaríamos juntos y que también teníamos un amor de pequeños muy lindo. Él solo se ronrojaba y reía y yo solo los ignoraba ya que yo aún no pensaba en esas cosas del "Romance." Los días que no lo veía después de escuela el solía ir al día siguiente a la escuela hasta mi salón a preguntarme si todo estaba bién. Una amistad casí perfecta…. Pero luego crecimos y solo nos veíamos los fines de semana ya que el decidió unirse al equipo de Basketball de la escuela. Fué duro para mi pero aún así yo tenía mucho en que pensar y mucho en que trabajar. Chuy y Fernanda (mi mejor amigo principalmente estaba un año adelante de nosotros y obviamente nunca hacía tarea con nosotros) hicieron mi semana mejor aunque fuesen de tarea. Pero conforme el tiempo pasaba tenía que hacer cosas los fines de semana con mis demás amigos y el con su equipo. Un semana, dos semanas, tres semanas, pasaron sin mas y sin saber de el. No me volvió a buscar y yo decidí ir a buscarlo, ya que ni en la escuela lo ví, malditas semana de exámenes finales. Aún recuerdo las lágrimas y el dolor de mi primera decepción, el se había ido lejos… se había mudado sin decirme nada, dejando un corazón roto por primera vez. No hable por semanas, no salí por días y no volví a la casa de mi abuela por un tiempo ya que cualquier recuerdo cercano a el me dolía. ¿Fué mi culpa? ¿Fué de él? Nadie sabe y nadie sabra, nunca volvia a hablar de el, tarde 6 años en saber de el, me enteré que casi murió ahogado y su amigo había fallecido, quise ir darle mis condolencias pero no sabía como, no sabía si me recordaría, tenía miedo a saber que yo nunca fuí tan especial para el como el para mi, nisiquiera sabía donde se encontraba el en esos momentos. Nunca supe más de él y aún espero hacerlo algún día muy cercano.
