Los mejores amigos

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Yasuhiro estaba sentado solo en una mesa en Café Deux Magots. El negocio debe estar lento hoy porque no hay otros clientes, a pesar de que hoy es sábado. Simplemente bebió café y esperó. Unos minutos más tarde llegó la persona quién esperaba.

- Perdón por la tardanza- respiró Josumi. Sus mejillas están rosadas y su rostro está cubierto de sudor por tanto correr.

- ¡Oh, no hay problema!- Konoe sonrió- ¡Acabo de llegar!

Josumi se sentó frente a él y miró un menú.

- Ooh, hay un nuevo parfait de chocolate que siempre quise probar.

- Adelante, pídelo- Konoe la miró con cariño- Ya que es nuestra primera cita, hagámosla más especial.

Ella se sonrojó y bajó la mirada.

- Estoy tan feliz de que estés aquí, Yasuhiro... Tenía tantas ganas de verte. 

- Sí yo también.

Mientras se miraban, Josumi noto algo en la mejilla derecha de Konoe estaba más rosa que el resto de su cara, acerco su mano para tocarla y noto que tenía maquillaje en polvo.

- ¿Por qué te pusiste maquillaje?- pregunto, confundida.

Yasuhiro dejo de mirarla los ojos y volteo a otro lado. Lucía avergonzado.

- P-por que...¡quería quedar bien frente a ti!- dijo Konoe, tratando de poner una sonrisa- Quería hacerme un...¿Cómo le dicen las chicas?...¡Un retoque, eso si!

Josumi dio una pequeña risita.

- Pero no hacía falta que hicieras eso. Aún así te ves guapo.

Josumi de repente notó que sus mejillas estaban calientes y húmedas. Por alguna razón, comenzó a llorar y no lo notó. Konoe se acercó y tomó su mano. Se veía feliz y triste al mismo tiempo. Josumi notó que el área alrededor de ellos estaba cubierta por una espesa niebla. No podía ver el café y todo lo demás excepto ella. Josumi lentamente comenzó a recordar lo que sucedió. 

- Y-Yasuhiro...- su voz tembló. Antes de que pudiera decir algo más, la niebla comenzó a envolver a su novio- ¡Espera, no te vayas! ¡No me dejes, por favor! ¡¡Yasuhiro!!

Se escuchó una fuerte explosión y Josumi se despertó. Tomokazu había golpeado la puerta para llamar la atención de su hija. Josumi estaba tan sorprendida que rodó fuera de la cama y aterrizó en el suelo.

- ¡¿Q-qué?!- demandó Josumi, tratando de despertar.

- ¡Ya te dije que te despertaras cinco veces!- Tomokazu le gritó desde el otro lado de la puerta- Son casi las 11 de la mañana. No me importa si quieres dormir hasta tarde todo el día, solo abre la puerta para que pueda coger tu ropa para lavarla.

Tomokazu escuchó sonidos de Josumi gimiendo, levantándose de la cama y abriéndole la puerta. Su hija adolescente parecía un desastre: solo vestía su pijama, sus ojos estaban inyectados en sangre y su cabello estaba suelto y desordenado, debido al llanto constante y la falta de sueño.

Josumi se paró sin decir palabra cerca de la puerta mientras Tomokazu recogía su ropa de su cesta y abría la ventana para dejar entrar algo de sol y aire.

- Oye, Josumi- comenzó. Él trató de sonreírle- Después de que termine de lavar la ropa, ¿quieres acompañarme a almorzar? Podemos comer en Tonio's

- No tengo hambre, papá- murmuró Josumi.

- Está bien...Bueno, si tienes hambre, preparé comida en la cocina.

Tomokazu se enteró hace un par de días que un chico de su escuela desapareció y resultó ser su novio a quien ni siquiera había conocido todavía. Josumi estaba tan angustiada que se saltó la escuela ayer y se negó a salir de su habitación desde entonces. Tomokazu no sabía qué hacer; Josumi no estaba tan destrozada cuando su abuelo murió. Está desesperado por cualquier cosa que pueda ayudar a su hija, luego se acordó de alguien que tal vez pueda ayudarla así que fue hacia el teléfono y marco el número de esa persona.

Diamond is Unbreakable (Versión Female)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora