El primer encuentro

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La dama se quedo mirándome por un segundo, seguramente pensaba que la estaba espiando, ciertamente me había quedado un rato observándola pero no fue con la intención de espiarla, cuando me dignaba a explicarle la situación la chica decidió hablar

?: Disculpa, te perdiste ?

Foxy: no para nada, acabo de llegar a visitar a alguien y me sentí intrigado por el rosal, lamento haberte asustado

?: no hace falta que se disculpe, después de todo el rosal es publico

La chica se levanto y sacudió su falda y me miro con una dulce sonrisa

Margott: Mucho gusto me llamo Margott, pero las personas del pueblo me dicen Mangle

Foxy: Un gusto en conocerla dije estrechando su mano amablemente, soy Foxy Richardson

Mangle: debes venir a ver a la señora Laia

La dama pronuncio el nombre de mi abuela y me sorprendió, se que el pueblo no es muy grande pero, de lo poco que sabia de mi abuela es que ciertamente no era una persona sociable

Foxy: correcto, es mi abuela, vine por que su estado empeoro, acaso es usted cercana a ella ?

Mangle: si, mi madre trabaja con ella, la verdad ha estado bastante enferma, pero es algo terca y se niega a quedarse en cama

Rei ante el comentario, tal parece que no ha cambiado en nada, de los pocos recuerdos que tengo de ella, es ver a mi padre discutir con ella por no hacerle caso a los médicos

Foxy: Bueno a sido un placer conocerla pero ya se me hace algo, espero verla de nuevo señorita Margott

Mangle: Collins, Margott Collins dijo con una sonrisa

Después de despedirme de la dama comencé a dirigirme a la casa de mi abuela, y los nervios empezaron a volver y mil preguntas invadían mi mente, como reaccionara al verme, que es lo que quiere decirme, que podría decir que justifique el haber dejado a su hijo enfermo solo

Cuando me di cuenta ya estaba frente a la casa, era sin duda la casa mas grande del pueblo, se podría decir que es la casa de campo de una familia de clase alta, al cruzar el portón de la entrada una señora salió corriendo a recibirme y no pude evitar sonreír, era Salma

Salma: mi querido Foxy, mira cuanto has crecido!

Foxy: como estas señora Salma? dije sonriendo dulcemente

Salma antes trabaja en la mansión cuando era niño y era muy cercana a la familia, ella solía ayudar a mi madre a cuidarnos, pero cuando mi abuela se mudo al campo decidió venir para estar mas cerca de su familia

Salma: mi querido Foxy, ya eres todo un joven, seguro muchas damas de la sociedad están deciando ser tus prometidas

Foxy: no has cambiado nada Salma, como has estado? dije sonriendo

Salma : además de la enfermedad de la señora Laia , todo va bien, pero basta de charla tu abuela te espera adentro

Entre en la casa y Salma me llevo hasta en salón, en ese momento la vi, una señora elegante, de cabello negro tomando una tasa de te

Laia: pero miren a quien tenemos aquí, la viva imagen de mi Azim

Foxy: hola abuela

Laia: Vaya sigue siendo tan serio como siempre sin duda no heredaste lo extrovertido de tu madre, aunque también puedo afirmar que tu seriedad es por que me guardas cierto resentimiento

Foxy: al menos aceptas que tengo motivos para guardarte resentimiento

La señora bajo la mirada y coloco la tasa sobre la mesa

Laia: por eso te envié a llamar necesitaba que al menos uno de mis nietos supiera la verdad y quizás así me perdone

Foxy: nada de lo que digas lograra que te perdone, puedo entender que decidieras venir lejos, y que no nos enviaras cartas , pero como se te ocurre dejar a tu hijo solo, estando a punto de morir

Laia: si es así entonces también deberías guardarle resentimiento a tu padre, después de todo esto fue su idea

Foxy: Que dices?!

Entre las rosas (Foxangle)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora