Capitulo 6

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Cuando me desperté al otro día lo primero que hice fue mirarme en el espejo, me asuste al ver que mis ojos estaban muy hinchados de tanto llorar. Me entre en el baño y me di la ducha mas larga que no me había dado en días, no me preocupe por la hora ya que eran las cinco de la mañana.
Salí del baño y me mire totalmente desnuda en el espejo, mi piel esta mas blanca de la cuenta y mi pelo estaba opaco ¿hace cuanto no me lavo la cabeza? No se, en fin mis uñas de los pies están muy largas, me las tengo que pintar pero es que no tengo ningún esmalten para ponerme. Le preguntare a Katherine y Sofia haber si tiene, ojalá que tengan púrpura o amarillo ya que esos son mis dos colores favoritos. Busque mi ropa con mucho cuidado para que Lisbeth no se despierte, me puse el uniforme del trabajo que es unos jeans negros y un poloche con un arco iris y por detrás del poloche el nombre del local: el arco.
Cuando salí a la calle todavía estaba oscuro me sorprendió y mire el reloj y eran apenas las cinco y treinta a.m.
Empece a caminar, caminar, caminar hasta que me cance y me senté en un parque que queda un poco serca de mi trabajo. Seré los ojos y respire. ¿ por qué la vida tiene que ser tan complicada? Estoy en verdad muy cansada, estoy viviendo con personas extrañas y por mis venas corre sed de venganza, yo quiero con toda mi alma a mi padre, pero a la misma vez lo odio, me siento sucia y no se que hacer, me siento pérdida en ningún lugar, tengo ganas de correr y perderme de todo el mundo, tengo ganas de un abrazo de mi madre o de mi hermano, pero si tan solo el estuviera vivo de seguro yo no estuviera pasando todo esto que estoy pasando, maldigo el carro que chocó a mi hermano gemelo, saben eran un día como cualquier otro y como todas las tardes Nacho y yo fuimos a comprar un helado, si tan solo yo no hubiera estado de mañosa el estuviera vivo, yo me quede sentada en un banco y el fue a comprar nuestros helados, cuando llego no me gusto el sabor que compro y le dije que fuera a comprar otro ya que el ronpasa no me gusta, el fue y justo cuando estaba cruzando la calle paso un carro rojo y acabo con la fugaz vida de mi hermano, mi hermano, mierda, el era mi hermano.
Me seque las lagrimas que corrían por mis mejillas como caballos de carreras y mire la hora las 6:12 a.m faltan quince minutos para que habrán la cafetería.
Ya eran las once de la mañana y todavía falta veinte minutos para mi descanso, y creo que mi estomago se va a comer a mi hígado.
-oye bonita. Me llamo un chico desde la barra
-yo lo atiendo. Dijo Alisson detrás de mi.
- no, yo quiero que ella me atienda.
- no hay problema. Le dijo Alisson con cara triste y se marcho.
-¿ que va a querer? . Le pregunte tomando nota.
- yo quiero un paseo contigo y si las cosas salen bien un......- no deje que terminara y le dije:
- no estoy para juegos pedazo de hombre, mejor dime que quieres- le dije un poco alterada
- justo como me gustan, con carácter. Me dijo con un brillo en sus ojos y una sonrisa perfecta
- mira chico no estoy para juegos,mejor dime que quieres. Le dije apunto de explotar.
- mi nombre es Frank. Dijo aun con una gran sonrisa
- ¿ y qué,Frank dime que quieres?
- te diré mi pedido solo si me dices tu nombre preciosa.
- mi nombre es francisca- le dije mintiendo.
- perfecto, y único igual que tu.... Francisca.
- ahora tu pedido.
- un jugo de cereza.
- enseguida sale
Fui a la cocina a decirle a Alisson que el chico quiere un jugo de cereza.
- ¡no puedo creer que Frank este hablando contigo!- exclamó Alisson histérica .
- y eso que?- le pregunte preparando el dichoso jugo.
- El es el hermano menor de Estefany
Gire mi cabeza como la niña del exorcismo y mis ojos se habrieron de tal modo que me dolieron.
- enserio?- le pregunte con vos de hilo y muy poco auditiva.
- si, esta bueno ¿ verdad?
Moví mi cabeza asintiendo y soltando una risa que no duro mucho.
- aquí tienes. Le di el jugo a Frank
-gracias francisca. Me dijo y empezó a hablar con una chica que estaba sentada a su lado. Ok. No esperaba menos,me dije a mi misma y mire nuevamente el reloj y faltan diez minutos para mi almuerzo así que me puse a limpiar las mesas de afuera.

Laura..Donde viven las historias. Descúbrelo ahora