I Want Your Love, I Need Your Love

Prólogo

⚠️ Advertencias ⚠️

•~OoC ( Out of Character )
•~ Universo Alternativo!Omegaverse: Cherry!Omega y Joe!Alfa.
•~ Se usa mucho el termino "cachorro" para referirse a los hijos.
•~ Matrimonio arreglado/por conveniencia.

[...]

Cuando Kaoru y Kojiro se conocieron, eran apenas unos niños.

Ambos se habían llevado demasiado bien. Habían congeniado como si fueran almas gemelas que se habían separado por años, pero que con el tiempo el destino se encargaba de juntarlos una vez más.

Kaoru recordaba muy bien aquel día.

Lo recordaba con nostalgia y tristeza en su corazón.

[...]

Los Nanjo y los Sakurayashiki eran las manadas más prestigiosas de todo Japón. Sin embargo, carecían de algo muy importante.

Carecían de Omegas.

Desde hacía bastantes años, ningún cachorro se había presentado como Omega. Todos terminaban siendo Alfas o Betas. Y los Nanjo y los Sakurayashiki no entendían a que se debía tal "rareza"

Confundidos y extrañados por la situación, decidieron esperar. Ninguno de ellos perdía la fé de que en algún momento un cachorro de la manada se presentaría como Omega.

Los padres de Kaoru anhelaban intensamente que él fuera el Omega que tanto habían deseado las dos manadas. De esa forma, tanto los Nanjo como los Sakurayashiki, unirían a las manadas y serían una sola.

Cada año sin falta, los Sakurayashiki y los Nanjo se reunían para celebrar el cumpleaños de Kaoru. En ese entonces, un Kaoru muy pequeño e inocente, no era consciente del porqué sus cumpleaños los celebraban con tantas personas reunidas. Él, ajeno a los deseos de sus padres y de los Nanjo, creía que era algo muy normal. Creía que era muy normal que un médico los visitara en cada cumpleaños para darles un informe sobre sus cambios hormonales.

En algunos casos ( muy pocos, de hecho ) el segundo género se presentaba antes de que el cachorro entrara en la adolescencia. Habían cachorros que se presentaban como Alfas u Omegas con tan solo tener diez años de edad. Sin embargo, muchos de estos terminaban siendo recesivos.

Y para los Sakurayashiki y los Nanjo era importante que sus hijos fueran un Omega y un Alfa dominante. De esa forma, el balance en sus clanes volvería a como era en un principio; con omegas y alfas predominando sobre los betas.

Kaoru se observó detenidamente en el espejo que había en su habitación. Hoy era su cumpleaños número veinte. Una fecha de suma importancia para sus padres y para su manada.

—¿Estás listo, cariño?

Su madre entró en la habitación y se acercó a él. Lo miró por varios segundos y después sonrió.

—Te ves sumamente hermoso, Kaoru —dijo ella, acomodando un mechón suelto que tenía su hijo —No cabe duda de que Kojiro quedará fascinado y cautivado cuando te vea.

Kaoru no dijo nada, solo soltó un leve suspiro. Algo que no fue desapercibido por su madre.

—No deberías estar desanimado, querido. Después de todo, hoy anunciáremos tu compromiso con el hijo de los Nanjo.

—Un compromiso con el que Kojiro no está de acuerdo...—murmuró.

—Puede que no lo esté ahora, pero cuando te vea, sin duda cambiará de opinión.

—No lo creo, madre. No creo que Kojiro quiera renunciar a su libertad para estar con un omega y volverse el lider de la manada.

—Pues tendrá que hacerlo. Lo quiera o no. —habló con firmeza la mujer.

—Pero madre...

—Nada de peros, Kaoru —le advirtió su madre, dándole la espalda y caminando hacia la puerta —Tenemos que apresurarnos y bajar. Todos nos están esperando.

Kaoru soltó un suspiro y, con el rostro ligeramente agachado, la siguió.

Su padre, su manada y los Nanjo lo estaban esperando. Por lo tanto, no podía retrasarse por más tiempo. Incluso si no deseaba verlos.

Cuando Kaoru se presentó como Omega, todos se alegraron y festejaron el acontecimiento. Finalmente, después de bastantes años, las plegarias de las dos manadas habían sido escuchadas.

Kaoru sería el Omega y la pareja de Kojiro. El encargado de dar a luz a los futuros cachorros alfas y omegas dominantes de la manada.