Capitulo V - Sorpresa

2 1 0
                                    

Acabe reventado del trabajo, no estaba acostumbrado a estar tantas horas seguidas trabajando, pero así es la vida, de camino a casa me di cuenta de algo, me di cuenta de que si lo que yo siempre he querido era sacar un libro

por qué no empezar ya, podría contar la historia de como llegue aqui, de como

cumpli mi sueño, siempre quise llegar aqui, cumplir mi sueño y lo logre,

el siguiente sueño era crear un libro así que a ello me puse.

Al llegar Carlos y Charlie me propusieron ir de fiesta por la noche a lo

que me negué porque no me encontraba con fuerzas, entre que Ariana no me contestaba y que había tenido un dia duro de trabajo, necesitaba pegarme una ducha y quedarme tranquilo en casa así que me fui a duchar,

después de ducharme me prepare un bocadillo de tortilla de patata

y me senté en el sofá a ver Netflix me puse Stranger Things y de eso a

15 minutos después me encontraba sentado frente a la tele pensando, que estoy haciendo, estoy aquí en Los Ángeles y estoy en casa viendo la tele

así que cogí y me fui a la fiesta con Carlos y Charlie por ir un rato no iba a pasar nada, aunque mañana trabajara no era la primera vez que me iba de fiesta

el dia antes de trabajar.

Al llegar a la fiesta en un chalet increible, tenia una pedazo piscina

y un jacuzzi que no había visto en mi vida un casoplón así,

me encontré con Carlos y Charlie que se encontraban en la parte interior de la casa,

nos fuimos a por un par de cervezas y mientras charlabamos en la cocina

me fije en una chica que se encontraba en la piscina me resultaba familiar,

y tanto que me resultaba familiar como que era Ariana y se encontraba con otras

dos chicas que estuvieron ayer, estaba dispuesto a ir a pedirle explicación de por qué no me ha contestado a los mensajes, cuando Carlos me detuvo...

-Carlos: ¡¿Qué haces?! ¡estás loco!

-Saul: no me a respondido a los mensajes en todo el dia

-Carlos: ya, pero si vas ahora vas a parecer un pringado desesperado

y no creo que eso sea el mejor plan

-Saul: tienes razón...

Cogi y me fui de alli

-Carlos: ¡¿A dónde vas?!

-Saul: a casa.

Cuando me estaba yendo resulta que ella me vio y se acerco rapidamente a mi

-Ariana: anda que casualidad, ¿que tal?

-Saul: bien... yo me iba ya Ariana

-Ariana: quédate un rato va, que tenia ganas de verte

-Saul: entonces... ¿porque no contestabas a mis mensajes?

-Ariana: es que anoche en la fiesta perdi el movil

Esas palabras me produjeron un gran alivio.

-Ariana: qué me has mandado mensajes, ¿me has estado buscando?

-Saul: pues sí... jajajaj

-Ariana: qué mono

-Ariana: ¿Vamos a tomar algo?

De allí fuimos a la cocina y nos cogimos unas cervezas, de allí nos fuimos a

un sitio más tranquilo para estar solos, ami solo me rondaba una cosa por la cabeza

y era besarla, hoy sería yo quien la besaría, hoy no me echaria atras.

Después de él incómodo pero intenso beso, este tendría que ser un beso de leyenda, empezamos a conversar sobre cómo habían sido nuestro primer dia

de trabajo en los Ángeles y por lo que me contó le fue mejor que ami,

ni quejas ni frustración, yo en cambio había sido un día duro hasta ahora,

su presencia me saciaba todos los malestares.

-Saul: sabes, verte me ha alegrado el día...

-Ariana: A mi me ha gustado verte, pensé que no podría verte más y eso me disgustaba (dijo Ariana sonrojada).

Nos miramos y nos fuimos acercando, poco a poco cuando de repente escuchamos gritos que vinieron de el patio, nos dirigimos corriendo, y estaba todo el mundo alrededor de la piscina por que un tio se habia tirado del tejado, gracias a este chaval he perdido la ocasión de mi beso, seguiré luchando por él esta noche.

Había una mesa de brig pong en el salon nos dirigimos allí a jugar contra otra pareja,

soy muy competitivo le dije no me decepciones a lo que a eso hizo un tiro a lo jugadora de baloncesto y metió el primer tiro, empezábamos bien, esta chica lo tenía todo, me ponía nervioso y pues falle mi tiro y nos tocó beber, al quinto fallo se rió mirándome y me dijo quieres emborracharme¨ no lo había pensado pero no es mala idea.

Ganamos la partida gracias a ella la verdad, yo jugué muy mal, de allí nos fuimos al sofá estábamos un poco mareados y con la risa floja, ella me puso las piernas encima a lo que yo intente disimular que me estaba emocionando.

UNA VIDA SIN LÍMITES Donde viven las historias. Descúbrelo ahora