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Ya es domingo, el fin de semana pasó muy rápido y ya e preparado todas las maletas.

Lamentablemente mamá y papá no saben de esto, seguro que se alegrarían de mí. Talvez esto sea la señal de un nuevo comienzo, una nueva vida, seguro que es mejor.


Domingo por la noche

Ya estoy en el avión, desplegamos hace 5 minutos y es maravilloso ver las luces de las casas iluminadas.

Me quedaré en casa de un niño de mí Instituto de intercambio, talvez también va a mí clase... Eso sería mucha casualidad.

Hay una pantalla con una pelicula, pero yo traje un libro.

Leo una página.... Y otra..... Tras otra....

Al fin veo por la ventanilla edificios altos, ya e llegado.

Aquí aún es de día por la diferencias de horas. Bajo del avión y buscó un taxi. Un taxista muy amable detiene su coche y me lleva a la dirección de mí nueva casa. Le pago, agarro las maletas y pico al timbre de la casa mientras el coche se va.

La casa tiene dos pisos, un pequeño jardín delantero y en él hay flores muy bien cuidadas.

De repente abre un chico.

- hola, soy t/n Voz, la alumna de intercambio. - digo con una gran sonrisa.

(A partir de ahora es como si habla en inglés)

- hola, soy Mark, bienvenida a mí casa. - responde amablemente. Entro a la casa y él me ayuda con las maletas mientras dice - vivo con mí madre y mí padre, todas las habitaciones están arriba, dos baños (uno arriba y otro abajo), y en la planta baja hay la cocina, Sala de estar, etc...

- gracias, eres muy amable- le digo.

Él solo me sonrie y me enseña la casa. Sus padres han ido a comprar. Dejó las cosas en mí habitación y él invita a un paseo para que conozca el barrio. No tuve más opción que aceptar, necesito saber que hay rodeando la casa y el Instituto.

El Instituto está a unos 10 minutos caminando, también hay un autobús escolar que nos recoje en cada casa por si vives a más de 15 minutos caminando.

En todo el paseo Mark no deja de hablar, explicando cosas de él, su familia, la ciudad, el Instituto y haciéndome preguntas sobre mí. No me molesta que hable tanto, es agradable escuchar su voz, sobre todo escuchar como siempre saca conversación, hasta en momentos incómodos.

Él me a explicado que voy a su clase, somos 20 alumnos, 11 niños y 9 niñas contándonos a nosotros dos. Me a hablado de sus nombres, formas de ser, amistades y relaciones amorosas en toda la escuela. Para ser sincera no me enteraba de mucho porque es demasiada información para un solo día aunque algo si que recuerdo.

Al llegar a la casa ya estaban los padres de Mark.

- ella es t/n, la alumna de intercambio - dice mark.

- yo soy Emma, madre de Mark.

-y yo Norman, su padre.

- es un placer conoceros, estoy muy feliz- digo

- supongo que tienes hambre, quieres algo? - dice Emma amablemente.

Paraíso Verde (aidan gallagher) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora