》La casita de Namjoon ♡

4. La habitación de registro.

Entrar a la habitación sorprendió totalmente a Namjoon. Especialmente porque no había una conexión tan hogareña como la ventana de Jimin o el pasillo de Taehyung adecuado a su imagen y gusto.

En cambio, parecía que se encontraba en una oficina, tan pronto como dio un paso adelante y cerró la puerta detrás de sí, un rostro sonriente interrumpió su visión, junto a una gran pileta de papeles que fueron puestos sobre sus manos.

—¡Debes ser el forastero, te estaba esperando! —Exclamó el desconocido de gran sonrisa.

Parpadeando de forma confusa, Namjoon reforzó su agarre en el gran bonche de documentos para caminar con cuidado de que ninguno pudiera caer.

—¿Qué sucede?, ¿qué es todo eso?

—Anotaciones, papeles, cosas que necesitaremos para la clase de hoy, vamos, vamos, siéntate.

El chico de cabello rojizo nuevamente sonrió arrastrando una silla hasta él—Mi nombre es esperanza, pero relativamente compacto a lo que se conoce, puedes llamarme Hoseok.

—Soy Namjoon... —murmuró aún todavía confundido.

Hoseok sonrió de forma tierna—Lo sé, esta casita está hecha para ti y por ti, ¿Cómo no conocer al dueño?

Frente a ellos había una pizarra color blanco, tenía varias palabras escritas y unidas por hilos de colores, algunas encerradas otras simplemente subrayadas.

—¡Pero bueno!, no hay que perder más tiempo, entre más pronto llegues con Seokjin, mejor.

—¿Quién es Seokjin? —preguntó Namjoon curioso, tomó asiento donde se le indicó y dejó todos los papeles en la silla del costado. Había escuchado ese nombre antes de Taehyung.

—Oh, uno de los neurotransmisores que habitan está casita, yo también soy uno, ¡uno feliz y organizado, claro! —Murmuró Hoseok con su cantarina voz—, pero no te preocupes, lo conocerás pronto.

Asintiendo, Namjoon dejó vagar su vista sobre la pizarra frente a él una vez más, recordaba algo sobre el ventanal de registro, pero ante las palabras de Taehyung y Jimin, tenía menos miedo que antes así que curioso levantó su voz.

—¿Es difícil?

—No lo sé, el nivel de dificultad de las etapas de tu vida lo asignas tú, querido Namjoon —Hoseok se acercó a la pizarra y con una regla se plantó cual profesor animado por enseñar—, el ventanal de registro comienza desde que ingresas a la casita, pero oficialmente es en mi lugar donde procederemos con la organización de este mismo. Me gusta el orden, que puedo decir —se rió—, no hay nada más gratificante en esta vida que tener total control de tus emociones.

Namjoon suspiró profundo—Me gustaría hacerlo, a veces no puedo evitar herir a los demás por cómo me siento.

Ladeando su cabeza, Hoseok arqueó una ceja confundido—¿De qué hablas? Es imposible que hieras a alguien con tus emociones, querido forastero. Tal vez con acciones, pero las emociones son meramente intocables.

—Mi madre solía decirme que se sentía mal cuando yo me expresaba por qué entonces sentía que estaba siendo una mala madre, así que deje de decirle cómo me sentía cuando ella me gritaba o exigía cosas —comentó.

Hoseok palmeó el pizarrón con su regla interrumpiéndolo casi al terminar.

: —Si hay algo que necesitas entender, es que lo único que te pertenece en esta vida son tus emociones.

La sorpresa cruzó el rostro del menor.

—¿Mis emociones?

—¡Por supuesto! Son tus emociones, ellas son tuyas y nadie tiene derecho de decirte que hacer con ellas, ni decirte que puedes sentir y que no puedes sentir. Habrá gente que te quiera robar tus emociones y etiquetarlas a su beneficio, diciéndote "es que eres demasiado alegre", "es que lloras mucho", "es que te enojas mucho", "siempre estás triste", ¡Por supuesto que lo eres y estás! Eres humano y tienes derecho a sentir, no entiendo porque la gente señala lo obvio en vez de preguntarse genuinamente el por qué estas así y no quejarse de que estés así —Hoseok caminó hacia el otro extremo de la pizarra y señaló las palabras encerradas con marcador—, y, sobre todo, habrá voces externas que quieran hacerte sentir mal por el simple hecho de que tu expreses tus emociones.

Asintiendo para sí mismo, Namjoon comenzó a sentir una pequeña confusión que poco a poco iba disipándose.

—Comprendo...

—Por ejemplo, forastero. Tu madre te ha dicho "es que cada vez que haces eso, me haces sentir mal". Absolutamente no. Así como nuestras emociones nos pertenecen, también somos totalmente responsables de ellas y de cómo dejaremos que el ambiente socio cultural personal de tu vida influya en ellas, es verdad que la influencia es un factor importante, pero en tu vida tú eres el que decidirá como sentirte, no es lo mismo a decir "Es que cuando tú haces eso me hace sentir mal", a decir: "Es que tus acciones influyen en que yo me sintiera así".

Namjoon lo miró con ojos brillantes, de pronto las palabras de Taehyung teniendo aún más sentido.

—Responsabilidad afectiva... —murmuró bajito.

Hoseok asintió—La responsabilidad afectiva de uno mismo es demasiado importante, dominarte es una de las bases más importantes del registro emocional, puesto que tomar responsabilidad de tus sentimientos te da liderazgo emocional. Nuevamente, no es lo mismo decir "Me gustaría sentirme feliz", a decir "Yo voy a sentirme feliz", ¿ves como uno es un receptor pasivo y otro es un receptor líder?

—Sí, lo hago yo... es tan claro ahora, es como... no sé, es mucha información, pero sé lo que dices, entiendo lo que estás explicando, simplemente que poco a poco comienza a encajar con mis viejos hábitos y me hace darme cuenta de otras cosas...

—Desde el momento en que comienzas a entrenar tu mente, diciendo "yo", "yo me siento", "yo actúo", "yo quiero", tu ventanal de registro emocional comenzará a barrer sus cortinas de alegría al ver la autonomía y el manejo de emociones que, con el tiempo, creará buenos hábitos y posteriormente te llevará a una vida plena y feliz.

Namjoon miró sus manos unos momentos, queriendo procesar toda la información. Hoseok tenía razón, el comenzar a pensar con autonomía hasta que pudiera creérselo lo hacía real. Fue entonces cuando abrió sus ojos sorprendidos al ver que la habitación había cambiado.

—Oh, la oficina, se fue... —comentó asombrado, ahora se encontraba en una habitación más suave, con pinturas y plantas decorativas, algo que definitivamente él escogería.

Hoseok sonrió aprensivo—El ventanal de registro es tal vez la parte más confusa y difícil más no imposible de la casita, porqué a nadie le gusta aceptar que tiene que tomar responsabilidad por sus emociones, es más fácil echarle la culpa a los demás y decir "es que yo me siento así por tu culpa", cuando sólo estamos creando lazos dependientes que no nos llevaran a nada bueno. Es por eso que al entrar a la habitación de registro se presenta como una oficina descuidada y repleta de documentación, hay mucho que ordenar y que clasificar, es como la parte de tu cabeza en donde tienes que poner todos los cables en orden, una vez que logras realmente aceptar, probablemente no entender pero si aceptar la responsabilidad que hay sobre tu persona y la importancia de esta, es cuando tu mente está en paz y por consiguiente, la habitación de registro se proyecta de esa forma —mirando alrededor, Hoseok señaló un cuadro colgado en la pared—, paz, tranquilidad y aceptación, es todo lo que se presentó para ti, Kim Namjoon.

Cerrando sus ojos, nuestro protagonista respiro hondo y tranquilo, la sensación de autonomía nunca se había sentido tan satisfactoria como en ese momento.

-susy