capítulo 9

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CONTRATO A día___________  de  2011  («fecha  de  inicio»)ENTRE EL  SR. CHRISTIAN  GREY,  con  domicilio  en  el  Escala  301,  Seattle,  98889  Washington («el Amo») Y  LA  SRTA.  ANASTASIA  STEELE,  con  domicilio  en  SW  Green  Street  1114, apartamento  7,  Haven  Heights,  Vancouver,  98888  Washington («la  Sumisa») LAS PARTES  ACUERDAN  LO  SIGUIENTE 1.  Los  puntos  siguientes  son  los  términos de un  contrato  vinculante  entre  el  Amo  y  la  Sumisa.

Releo esas palabras intentando descifrar donde las he visto antes. Amo - sumisa. Castigo, azotes, límites tolerables.
El apéndice tres hace que mi corazón siga martillando fuerte en mi pecho, cuando reconozco las palabras Bondage y juguetes sexuales. Voy rápidamente hasta mi cuarto con la hoja en la mano y me siento frente a la laptop. Tecleo las palabras clave Amo-Sumisa y encuentro gran variedad de páginas explícitas a modo de definición que dicen que hay clubes para eso y también tiendas sexshop. Ok, no soy una mojigata para no saber lo que es un vibrador, una amiga de la universidad tiene uno, es normal, ¿pero esto?

¡Oh! A esto se refería Anastasia con lo de complicado. ¿No podía simplemente decírmelo?

Quizás era secreto

Dios, Christian es un dominante, pero honestamente no me puedo imaginar a Ana en posición sumisa mientras el la controla y le pega. ¡Mierda, no!

- ¿Qué carajos, Ana? - digo para mí misma en voz alta. ¿En qué está pensando al dejarse hacer eso?

Es el maldito secreto más grande que he descubierto, y no de cualquier persona, eso me daría igual. Es nada más y nada menos que del gran empresario multimillonario y dueño de la mitad de Seattle, Christian Grey, el novio de mi mejor amiga.

¿Su familia lo sabe? La pregunta correcta sería ¿Elliot lo sabe?
De todas maneras no correré el riesgo de mencionarlo y meter la pata.

¡Joder! ¿Qué debo hacer?

No, lo primero es hablar con ella, debo saber la verdad desde la fuente original del asunto, Ana.

Cojo mi celular para enviarle un texto a ella.

*Te veo esta noche. Esperando una laaaarga charla*

Espero respuesta pero no llega, debe estar liada con lo del cumpleaños de Christian.

Me pregunto ¿Qué le das a un hombre que lo tiene todo? El hombre no necesita nada de nada.
El celular timbra con un texto corto de vuelta de Ana

*Yo igual*

Bien. Ahora no sé qué hacer con esto.
Miro la hoja y decido que la guardaré para llevarla está noche. Ellos tienen mucho que explicar.

Este capullo jodidamente rico le gusta el sadomasoquismo.


Aún con la cabeza dándome vueltas por lo recién descubierto acudo al salón de belleza más cercano. Me quedo mirando un rato para ver si es bueno o no, y al parecer sí. Allí me hago las uñas y el cabello mientras escucho como hablan sobre el incidente de Grey. Aún es primicia en las noticias.

- creo que la señora Elena hubiera quedado devastada si algo le pasa. ¿Has visto como lo trata? Parece enamorada de él - cuchichean dos de las chicas estilistas.

- ¿Cómo no? Christian Grey es un sueño de hombre, ella tiene suerte de ser su amiga y socia - mi ceño se arruga ante la mención de mi cuñado.

- ¿Lo conocen? - pregunto distraída, como quien no quiere la cosa.

- por supuesto. Es amigo de la dueña y su socio - ¡oh, vaya! ¿Cuántas sorpresas más me llevaré hoy?

Katherine Kavanagh (libro 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora