Mi sueño fue interrumpido por culpa de una oleada de placenteras y exquisitas sensaciones que aparecieron por la zona más íntima y sensible de mi cuerpo, llegando hasta recorrer toda mi columna vertebral. Abrí mis ojos poco a poco y pude apreciar el bulto que se encontraba en la blanca y delgada sábana que me cubría. No me tomó más de dos segundos en echarla a un lado para así poder ver lo que estaba ocurriendo...Y vaya sorpresa me llevé cuando vi a Hanma entre mis piernas. Me quedé en silencio, confundida por unos breves instantes, pero poco a poco se fueron viniendo los recuerdos de la alocada y fogosa noche que había compartido con él. Humedecí mis secos labios con unos aires de inquietud pero sintiéndome bien a la vez, después de todo...Hanma sabía muy bien lo que hacía. Usando un hilo de voz algo débil y quebradizo le pregunté: "¿Q-Qué es lo que estás haciendo?" A pesar de que sabía perfectamente lo que hacía, no era tonta. Este me respondió al momento con esa voz tan profunda y grave que tenía, me daba escalofríos.-¿Es qué acaso no lo ves? Estoy desayunando. Me he despertado con hambre...Mucha hambre. Lo de anoche fue increíble, pero me temo que no lo suficiente como para saciarme-.
Escuché todas y cada una de sus palabras mientras me iba estremeciendo poco a poco. Era una persona sensible, pero lo era aún más con aquel hombre. Tenía algo que me hacía caer a sus pies, que me obligaba a mirarlo tan solo a él, desearlo. No me negué en ningún momento, sería una completa idiota lo hiciera, así que tan solo me dejé llevar. Abrí un poco más mis piernas y mordí mi labio inferior mientras sentía como el calor pasaba a mi cara, la cual se había ruborizado al completo. El obsceno sonido que se creaba ante el continuo roce de su lengua con mi intimidad era lo único que se escuchaba junto a nuestros jadeos y suspiros de placer. A Hanma le encantaba dominarme y volverme loca de esta forma, conocía mis puntos más débiles, no tenía nada que hacer contra él. Fui llevando lentamente mis manos hacia su cabeza para así hundir mis dedos en sus suaves y delgados mechones, cosa que pareció gustarle demasiado ya que justo en ese momento aumentó la intensidad de sus movimientos. Un pequeño gemido logró escaparse de mi boca y poco después escuché una serie de suaves carcajadas que provenían del mayor.
-Eso es...No guardes esos sonidos que tanto me gustan, ¿me has escuchado, pequeña? Se perfectamente que esto te hace sentir muuy bien y espero que me devuelvas ahora todo este cariño que te estoy dando. Me imagino que también tendrás hambre, ¿no? Pronto comerás tú también, por ahora quédate ahí y disfruta-.
Estaba cada vez más segura de que Shuji Hanma iba a matarme en cualquier momento. ¿Cómo era capaz de provocarme tales sentimientos? Me dejaba sin palabras, literalmente. Tan solo me limité a disfrutar, como él me había dicho. Soltaba algún que otro pequeño sonido mientras que sentía como el orgasmo me iba llegando conforme la velocidad que su lengua iba aumentando, no me daba ningún tipo de tregua. Sus hábiles y húmedas caricias hacían que mi espalda se arqueara, incluso llegaba a contraer los pequeños dedos de mis pies. Por unos segundos me pregunté...¿Cuánto tiempo llevaría ahí abajo mientras yo dormía? Anoche me dejó agotada y caí en un sueño extremadamente profundo. Aquellas copas de más hicieron que nos revolcásemos entre las sábanas, pero él ahora estaba sobrio...Y yo también. Una pequeña sonrisilla tontorrona salió de entre mis labios sin poder evitarlo, agradecí que no me hubiera visto justo en ese preciso momento, aunque aquella expresión se me fue al instante, ya que no tardé mucho más en alcanzar el climax. Todo mi cuerpo se tensó y Hanma se aferró a mí, queriendo probarme con gran desesperación. Me tomó de las caderas y me obligó a que me mantuviera quieta hasta que él quisiera. Después de eso cambiamos los puestos, aunque...La posición en la que nos encontrábamos era un poco curiosa. Me dejó sentada en la cama, con la espalda apegada al frío cabecero mientras que este se mantenía de pié frente a mí, dejándome a escasos centímetros de su ya erecto miembro. Sus manos tomaron mi cabello ya que este se encontraba suelto y lo terminó agarrando con una mano, ya que la otra la apoyó sobre el cabecero de la cama.
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⛓𝐎𝐍𝐄-𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒-𝐓𝐨𝐤𝐲𝐨 𝐑𝐞𝐯𝐞𝐧𝐠𝐞𝐫𝐬⛓
Fanfiction¿Tienes curiosidad por ver en qué tipo de situaciones te encontrarás con los chicos de Tokyo Revengers? ¡Adelante! ¡Pasa y disfruta de una agradable lectura! Estaré encantada de que tomes tu tiempo para poder echar un vistazo, no te arrepentirás, te...