⇢08⇠

107 22 3
                                    

Lo encontré en la azotea, su perfil era muy llamativo, aunque sus lágrimas me hacían preocupar. Me acerqué lo más lento posible, han pasado tres semanas desde que hablamos.

Té conté lo que pasó, tu me dijiste que había hecho bien, que aunque Jeongwoo se ponga así, no durará para siempre. Te pusiste a hacer bromas, hacías bromas acerca de mi posible futuro con Jeongwoo. Me hubiera reído sino fuera porque te vi conectado a varios cables mientras que tu cuerpo reposaba en una camilla de hospital.

Querido Leoncito, te queda poco tiempo.

Bueno, me senté a su lado y me miró de reojo, suspiró y se alejó un poco, no quería que estuviéramos así. Me acerqué más a él y, cuando se quería separar, lo tome de la mano. Pude ver su pequeño sonrojo en sus mejillas, tenias mucha suerte de haber encontrado a un chico así, Jaehyuk.

— Hablemos...

— Por eso me ignoraba, ¿No? — dijo de golpe e hizo que bajara la mirada asintiendo —. Já. ¿Qué gana con eso? Hizo que me preguntara a cada momento si era yo el culpable de nuestro distanciamiento. Es algo patético.

— Sí. Lo es.

— Y tú... ¿Cuándo pensabas decírmelo? ¿Cuándo vea la lápida con su nombre grabado ahí?

—Jeongwoo...

— ¿Que más te dijo que hicieras? Conozco a Jaehyuk como la palma de mi mano — apreté el agarre —. Así que dímelo.

Suspiré. Estaba en problemas, necesitaba de ti y tú no estabas ahí. Nunca creí llorar en un momento como ese, pero lo hice.

Levanté la mirada con lágrimas en mis ojos y miré sus ojos, observe todo su rostro y con mi mano desocupada acaricié todo su rostro. Él no recibió mal mis caricias, es más, creo que le gustó. Mi mano paró en su mejilla y antes de hablar me disculpé.

— Me dijo que yo... — baje la mirada —. Debía enamorarte.

El silencio no se hizo esperar. Todo lo que hago por ti, Jaehyuk.

— ¿Tu aceptaste?

— Me iba a negar, te juro que lo iba a hacer... pero era lo que pedía Jaehyuk, no podía decirle que no, y menos en ese estado.

Él me miró confundido, preguntándose si al menos había algún sentido en todas las palabas que dije. Aunque  pensándolo bien era estúpido, una idiotez.

No soy tú, Jaehyuk, no lo soy.

— ¿Por qué aceptaste? Dime una buena razón para no enojarme más de lo que estoy con los dos.

Hice mi mayor esfuerzo para que mi mente creará la mejor mentira del mundo, pero no podía quitarme aquella bendita frase de la cabeza. Pensaba que era el mejor momento para decirlo.

Me acerqué a él y acaricié su mejilla, él la acostó en la palma de mi mano — me gustaba esto — mientras negaba con la cabeza. Nuestras miradas conectaron y, como si sus labios fueran un imán, lo besé.

Él se quedó sorprendido y se separó de mí, viendo con confusión y miedo. No me puse a pensar en ti. Lo siento, Jae, en esos momentos solo me importaba mi felicidad. Me volví a acercar y el no retrocedió, lo volví a besar, esta vez si correspondió.

Nos separamos y uní nuestras frentes, podía sentir mis lágrimas cayendo y podía ver las lágrimas de Park chocar contra el suelo.

Lo siento, Jaehyuk.

— Me gustas... 

..

𝙷𝚢𝚞𝚗𝚐...𝚄𝚗 𝙵𝚊𝚟𝚘𝚛/ Hajeongwoo- JaewooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora