Las clases están por comenzar y como un buen miembro de comité disciplinario, Yui ya estaba preparado para comenzar a realizar realizar rutina de la mañana. No por nada era el presidente de dicho comité.
Todos los compañeros entraban a sus clases. La puerta de la entrada estaba por cerrar. Los últimos llegaron y ahora Yui se dirigía a sus rondines antes de clases, para asegurarse que nadie tratara de saltarse alguna.
A lo lejos, una figura femenina estaba sentada en una banca de madera que se encontraba en el patio. Yui suspiró y se acercó, encendió el megáfono y le habló.
—¿Qué haces ahí?
Ella se sobresaltó ante el repentino llamado y no pudo evitar comenzar a sentirse nerviosa. Ya sabía quién era, le habían advertido de él y estaba asustada de que este precisamente fuera su primer encuentro.
—Y-yo...
—La campana está por sonar. Por favor, dirígete a tu aula.
—Claro...— respondió, pero no se movió.
—Bueno, ya. No creas que la campana te esperará.
—Lo haré en un momento.
Yui claramente se molestó. Volvió a encender su altavoz.
—Vuelve a tu aula, ahora. Obedece a tu superior.
—¡Es que no puedo!— gritó por fin ella, mirandolo —P-perdón... no quise gritarle...— Yui la miró con enojo.
—Uno... dos...— advirtió, comenzando a contar como si de un niño pequeño se tratase.
—¡Senpai!— gritó —Es que... de verdad, no puedo... no puedo moverme...
Él lo penso un momento. ¿Cuál sería la razón por la que...?
—¿Periodo? ¿Le llamo a la enfermera? ¿A una profesora?
La chica se puso roja a más no poder. Fue muy directo.
—¡N-no senpai! Es que...— él, fastidiado ya, se acercó y logró ver su falda y mallas atoradas en la banca. No pudo evitar soltar una risa.
—¡N-no es gracioso!— se quejó apenada —Yo... estaba dispuesta a irme antes de que la campana sonara, pero al levantarme, sentí que algo me jaló y... la falda se rasgo junto con mis mallas...
—Pues que mala calidad de tela.
—¡Oiga, no se burle!— se volvió a quedar —Si me muevo... se va a terminar de romper todo...
La campana sonó. Yui suspiró y se hincó frente a la banca.
—Sostén esto— dijo dándole su libreta y su altavoz. Antes de hacer algo más, se quitó su saco y se lo dio —Levántate y tapate con él. Trataré de zafarlo.
Ella acató su orden y él quiso zafarlo, pero en consecuencia le pegó en la pierna.
—Lo siento. ¿De casualidad no tienes tijeras en tu mochila?
—Si... pero... si las corta... la falda y las mallas— se quejó, ganándose una mala mirada de él.
—¿Quieres ir a clases o no?— ella torció los ñabios y buscó las tijeras, entregandoselas. Yui trato de no cortar tanto material y entonces se levantó. —Listo...— suspiró —Vamos, te acompañaré a clase para que no tengas problema con tu profesor. Más tarde me encargaré de reportar aquel clavo.
—Por favor, imaginé que a usted se le atoraba el pantalón, senpai— se burló y a él le pareció perturbadora aquella idea.
—¿Ese es tu salón?
—Sip— antes de que entrara, lo detuvo sosteniendo la manga de su camisa —Senpai, ¿cuando puedo devolverle esto?— señaló el saco que estaba en su cintura, cubriendo aquel gran agujero en la parte trasera de su pierna.
—Cuando tengas tu falda nueva. No hay problema. Sabes donde encontrarme— dijo entrando al salón y poco después dejó que ella entrara, no teniendo problemas en absoluto. Ahora podía volver a su clase y más tarde al comité.
(...)
Él receso había llegado y Yui se encontraba en la sala del comité arreglando un par de reportes. Sus compañeros salían poco a poco pues el receso estaba por terminar. Cuando salió la última chica, una más entró, aunque no perteneciente al comité.
—Senpai— lo llamo y él la miró. De inmediato la reconoció en su cabeza como "La de la falda rota".
—Oh, eres tu.— ella asintió y dejó sobre él una bolsa plástica con su saco dentro.
—Aquí esta su saco, lavado, planchado y muy bien doblado— rió —Y un...— dejó un sando de frutas arriba —pequeño presente, espero le guste. Aunque, me gustaría comprarle algo más tarde. Como agradecimiento, claro— agregó rápidamente.
Yui soltó una risa y tomó el santo.
—Es... es suficiente con esto, muchas gracias.
—De ninguna manera, Senpai. No me puso un reporte y además me ayudo a entrar a clase sin objeción. Eso merece por lo menos dos presentes. Así que, por favor permitame comprarle algo más tarde— sonrió.
—Está bien. Te veré en la salida.
—Aquí estaré.
—¿Cuál...— dijo deteniendola antes de que se fuera —era tu nombre?
—______.— le dedico una reverencia y salio de la sala, dejando una gran y notoria sonrisa en el presidente del comité disciplinario.
▪︎☆▪︎
Yui no se aloco, así que bailemos *baila* jajaja
Siento este shot tan apegado al Yuis que me encanta. Y lo amo, claro, así que... #emoción.
-Choki.♡
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Aoppella!? •One Shots•
FanfictionA Capela es la composición musical creada sólo a base de la voz humana, sin acompañamiento instrumental. ¿Conoces a estos chicos? ¿Si? ¿No? Bueno, yo te los voy a presentar y te haré amarlos, así que, dale una oportunidad al libro y disfruta.