seven | 適応

786 64 5
                                        


Luego de aquel día siguieron viéndose durante más días, en secreto, claramente.

Sus encuentros dejaron de basarse solamente en sexo; no lo admitirían, pero comenzaban a disfrutar de la compañía del otro simplemente charlando o haciendo cualquier cosa.

No habían puesto etiqueta a su relación hasta dos meses después.

—Hey, Ddeonu —llamó al menor, quien estaba acostado boca abajo sobre la cama y jugaba con su celular.

El nombrado dejó el aparato de lado y centró su atención en el mayor.

JungWon mordió su labio inferior.

—Tú sabes que lo romántico ni nada de esas mierdas van conmigo.

Sunoo carcajeó.

—Ya lo sé —dijo obvio.

—Lo que quiero decir es que —se acercó hasta donde el menor se encontraba acostado— jamás creí dejar de odiarte —el rubio enarcó una ceja- mierda, sólo lo diré; me gustas, carajo, de verdad me gustas y eso está jodido. Estoy jodido por ti.

El menor sonrió; era la peor declaración que hubiese tenido.

Pero le encantó. Amó que JungWon fuera él mismo, que no fingiera algo que no es.

—También me gustas, JungWon —mordió su labio inferior.

Yang se inclinó y besó los dulces labios del menor.

—¿Quieres ser mi novio? —soltó de la nada.

El rubio rió bajito y asintió.

—Sí quiero.

Compartieron sonrisas y volvieron a besarse con calma y, sobre todo, amor.

𝔓𝔯𝔢𝔱𝔱𝔶 𝔖𝔞𝔳𝔞𝔤𝔢 | 適 応Where stories live. Discover now