Competition - Raura.

I

-¿Cuál es el Peso Atómico del Sodio?- Preguntó Raini, sonriendo.

Sabía la respuesta.

-Bueno, la Masa molar es de: 22,989769, pero en términos genelares, osea en el Número atómico la respuesta sería 11.

Sonreí al ver como Raini marcaba como correcta la respuesta.

-¿De dónde se saca el sabor de la Vainilla Artificial?.

-Del ano del Castor- Dije, asqueada.

-Ok, Lau- Dijo- Una última y descansas.

Asentí.

-Hablame de dormir, especialmente de Despertar.

Pensé un momento, pero luego respondí.

-Estudios realizados a través de todos éstos años indican que si te despiertas a las 3:00 AM es porque alguien te estaba viendo y si te levantas, es porque te quería ver más cerca.

Un escalofrío recorrió mi espina dorsal al terminar de hablar, ya que nunca había sido muy fanática de éste tipo de Datos.

-Perfecto, Lau- Me alagó mi amiga, Pelinegra.

Sonreí mientras le agradecía con la mirada.

Mientras caminabamos por los pasillos de la Preparatoria Marino High, pude ver a una pareja besandose, mientras éste aprisionaba a la chica contra el casillero, a ésta se le cayeron los libros, y por ende todos los apuntes que había tomado.

Bufé, no es que no me gustara el amor.

Me encantaba.

Es sólo que, hay mucha gente en éste instituto que en vez de estar preocupandose por sus estudios, está perdiendo el tiempo.

Suspiré mientras apartaba un mechón de mi (ahora) más largo cabello.

Apreté el agarre de mis libros y me dirigí hasta mi casillero.

(***)

Mientras buscaba mis tarjetas especiales para estudiar, un toquecito en mi hombro interrumpe en mi busqueda.

-¿Estás lista para irnos?- Preguntó Vanessa.

Desde hace bastante tiempo que mi hermana me venía a recoger al Instituto y no era algo que me molestara, así que me sentaba bien.

-Ya casi, espera... tengo que ir al salón de Química creo que ahí me dejé los apuntes- Dije, empezando a caminar.

Pude ver como Vanessa rodaba los ojos con fastidio... A ella nunca le gustó que estudiara tanto, decía que mi cabeza podría explotar, pero yo, simplemente, no le hacía caso.

Tuve que recorrer casi medio Instituto ya que el salón de Química quedaba en la otra mitad, lo que quería decir que quedaba bastante alejado de mi casillero.

Otra cosa que me molestaba.

Sacudí la cabeza un poco, apartando algo de cabello que había caído en mi cara hace un rato.

Con pasos algo rápidos me adentré en el salón de Química.

Creyendo que estaba sola me puse a revisar en todos lados, buscando mis apuntes.

El salón de Química era como cualquier otro, todo estaba lleno de tubos de ensayo y de extraños líquidos de diversos colores, yo conocía algunos pero no todos los que se encontraban ahí.

Comencé a revolver alguna cosas, aún buscando mi cuaderno.

Hasta que al final de todo el salón se encontraba él.

Él es la cosa que menos me gustaba en todo el Instituto.

-Shor- Lo saludé moviendo ligeramente la cabeza hacia un lado, tratando de ser amable con él por una vez, aunque me costara.

-Marie- Dijo también con expresión Neutra.

-¿Alguna vez me llamaras por mi nombre?- Pregunté, tratando de no perder el poco autocontrol que tenía y olvidandome por un momento del dichoso cuaderno y de mis apuntes.

-¿Cuándo tú me llamaras por mi nombre?- Contraatacó.

Y era cierto.

Yo era la que había iniciado éso, ya que la primera vez que hablamos, en vez de llamarlo Ross, que era su primer nombre, lo llamé Shor, que es su segundo nombre.

Sacudí la cabeza, nuevamente.

Concentrate, Laura.

-¡Tú eres un tonto!- Exclamé haciendo reír a Shor.

Yo podía ser la más inteligente.

Pero los insultos no se me daban muy bien.

Apreté los puños, furiosa.

Salí de allí echa una furia.

-¡Marie!- Escuché como me llamaba desde no muy lejos.

-¡¿Qué?!.

Estaba enojada.

-¿No quieres ésto?- Sonrió burlón.

Mi cuaderno.

N/A:

Hola!. Espero que les haya gustado el inicio de ésta historia, hay muchas cosas que descubrir, pero poco a poco se irán revelando.

Trataré de subir lo más pronto posible, aunque si me tardo es porque esté trabajando en otra cosa, no porque no quiera.

Nos leemos!

Bye!

xxPoopeyxx