MANUAL: "Como ser una princesa" ©

Capitulo 4 "Mas mentiras"

Narrado por Lea:

Con la falda ligeramente arremangada arriba de la rodilla y mi cabello despeinado, salí de la habitación de huéspedes con los tacones en mano.

Comencé a caminar rápidamente cuando escuche un carraspeo que me hizo parar.

Mierda, quien podría ser?

El rey?
El gato?

Me gire lentamente para ver quien había sido la persona que me había descubierto.

Isabel, mi cuñada.

- buena manera de conocerte, Lea.- la voz era ligeramente dulce.,

Iba vestida con una falda blanca y una camisa de tirantes con rayas azules, llevaba un maletín y una raqueta de tennis en mano.

Su expresión era de satisfacción.

- esa habitación tiene algo peculiar- la señaló con la raqueta- hay tres retratos de mi tatarabuelo, ya que esa solía ser su habitación, en cada uno tiene una pose diferente, la leyenda dice que su espíritu permanece allí, vigilando a los visitantes con sus seis ojos, ya que allí mismo murió de una enfermedad rara que se contagio en la guerra.

Hubo un silencio incomodo.

- creo que ambas estamos pensando lo mismo.- se acercó a mi- que ocho ojos an visto tus tetas.

Mis ojos se abrieron ligeramente.
No podía decirle nada, era la princesa de Bélgica!

A quien engaño, quería pegarle con la raqueta de tennis a su flácido trasero.

Noto mi reacción y soltó una risa burlona.
- oh querida, no te lo tomes tan literal, perdona mis expresiones pero desde que volví de Brasil mi vocabulario a cambiado.

Asentí con la cabeza. - si, supongo. - dije con cierta hipocresía

- Mmm y también que no me gusta que forniquen en mi área del palacio. - dijo con irónica.

La vi directamente a los ojos, tenía una sonrisa escondida.

- tu fuiste la niña de 15 años que perdió su virginidad con un brasileño?- sonreí. - en un baño?

Su cara se torno de un color rojo y sus ojos se abrieron de par en par junto con su boca.

Había dado en el centro.

Me tomo del brazo y me guío al final del pasillo.

- eres una completa zorra!- soltó con emoción- me agradas. - sonrío- soy Isabel pero me puedes decir Bel, odio que me digan Isa.

Mmmm que cambio tan repentino.

Me tendió la mano sonriendo.

Dude en estrecharla pero rápidamente me rodeo con un brazo la cintura.

- yo soy Elena pero me dicen Lea, como ya sabes. - le di unas palmatidas en la espalda.

- oh se todo de ti - dijo feliz. - ven, vamos a mi habitación. - volvio a tomarme del brazo.

Corrimos por el pasillo y giramos unas tres veces, esa "área" del palacio, era sumamente grande.

Llegamos a un pasillo donde al final habían dos puertas gigantes que se encontraban vigiladas por dos guardias.

-buenas noches- dijo Bel.

-Buenas noches princesa - respondieron al unísolo.

Abrieron las puertas de par en par, primero entro ella y después yo.