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La verdad detrás de todo

°°°°

—Archer...¿Que?. —musite por lo bajo.

Aquello me producía unas intensas ganas de vomitar, es que, lo veía con mis propios ojos y no podía creer lo que estaba viendo.

—¿En serio te afecta eso?. —pregunto en un tono desigual.

—Lo dices como si hubieras visto esto antes. —le lanze una mirada furtiva.

El se quedó callado, no respondió.

—Ya me imaginaba que hacían este tipo de cosas. —dijo con simpleza.

—¡Ustedes, pónganse a trabajar!.

El chico moreno de antes nos ordeno.

—Muevete, o sospecharan.

Archer es insoportablemente atractivo.

Intenté no mirar los tanques de agua lo mas que pude, no quería verlo, pero de vez en cuando miraba de reojo por que así tal vez y la vería a ella.

—Al menos no necesite lentes de contacto. —dio un suspiro, murmurando.

Básicamente los lentes de contacto pueden detectar sensores de movimiento bajo tierra.

Pero en este caso no los necesite, por que ya encontramos la base subterránea.

En eso, se escucho el ruido de un vidrio rompiéndose.

Debe a ver sido uno de los tanques.

Todos miramos en dirección de el ruido, y me quedé estática por un momento, una niña de piel pálida, vendas en los pies y manos y parte de su cuello, que ya estaban mojadas por que estaba en ese tanque con instrumentos conectados a su cuerpo.

Callo débil al piso, y suspirando débilmente, como pudo, se puso de pie, grave error, se cortó parte de su mano, y ahora era un líquido extraño mezclado con sangre.

La niña levantó la mirada como pudo y se fijó en mi, sus ojos verdes carentes de brillo me miraban sin expresión alguna, algo así como »ayudame« pero son demostrarlo.

Estaba demasiado delgada, a mi parecer debe de tener de trece a catorce años, su cabello estaba demasiado largo, de color café, deduje que, por si apariencia física y cabello, debe haber estado en este lugar varios meses.

Cuando me giré a ver a Archer, ella corrió en dirección hacia el, el no reaccionó a tiempo, pero ella lo abrazo, fuerte. Y levantó la mirada temblorosa, pude notar su labio inferior temblar un poco.

Por favor señor, ayúdeme...

Y esas palabras, me destrozaron completamente, no entendía como este tipo de personas podrían hacerle esto a unos simples niños.

Y esas cuatro palabras, las dijo entrecortada y con la voz débil, murmurando, aún se aferraba a el con todas sus fuerzas.

Tengo que matar al responsable de esto.

El se inclinó, pensé, por que si, lo pensé por unos segundos que él iba a decirle alguna frase como. »todo va a estar bien pequeña« o »tranquila, te ayudaré a salir de aqui«

Aquella Noche © [Completa✔️] [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora