Pov Blair
Ya había terminado el verano y tocaba volver a la preparatoria.
Otro año más, en el mismo pueblo, con los mismos compañeros de clase y la misma rutina aburrida de siempre. He de decir que mi verano tampoco fue de lo más emocionante que digamos, pasé mis mañanas trabajando en el negocio de ropa de mi mamá, cómo castigo por haberle hecho un pequeña abolladura a su auto y por las tardes iba a casa de mi mejor amiga a quejarme de lo aburrida que había sido mi mañana y pasar el rato.Hoy es el primer día de clases de mi -gracias a Dios- último año. La verdad es que no tengo muchas espectativas, pero si me alegraba por fin ya no tener que trabajar en aquel local de ropa.
-¡Ya estamos en nuestro último año! -Chilló mi amiga emocionada desde su asiento a mi lado- ¿Sabes lo que eso significa?
-Iluminame -dije divertida por su emoción mientras ponía mis cosas sobre la mesa.
-¡Que tendremos un año para disfrutar al máximo!
Sonreí al ver su emoción que era bastante contagiosa y estuve a punto de responder cuándo noté que se quedó mirando la puerta fijamente, me giré hacia aquel lugar y me encontré con un chico muy alto, de pelo negro, ojos verdes e increíblemente atractivo mirando desde la puerta a mis compañeros. Supongo que notó mi mirada porque casi al instante sus ojos viajaron hasta encontrarse con los míos, en cuestión de segundos mis mejillas se tiñeron de rojo, por suerte dudo que se haya dado cuenta, ya que nuestra profesora de historia pasó rápidamente a su lado.
-¿Quien es ese dios que acaba de entrar y porque necesito tirarmelo? -susurró mi amiga en mi oído.
Le pegué en el hombro divertida -¡Joanne!
-¿Que? Si sabés que tengo razón.
Ignore eso último, ya que estaba bastante ocupada siguiéndolo con la mirada hasta sentarse junto a Kyle después de buscar un lugar por unos segundos.
-¡Bienvenidos todos a su último año cómo estudiantes de preparatoria! -Hablo la profesora Amelia Richards- Sobre todo quiero que le demos la bienvenida a un nuevo alumno que se nos unirá a partir de hoy -Se detuvo para mirar a aquel jóven que tenía una mirada pensativa, casi cómo si no estuviera prestando la mas mínima atención- ¿Quieres presentarte?
La mirada de aquel chico se posó sobre la profesora, se encogió de hombros y respondió- Claro, supongo.
Una vez de pie frente a todos sonrió discimuladamente, como si se estuviera riendo de algo.
Enarque la ceja y me acomodé en mi silla con curiosidad.
- Mi nombre es Callum Murphy, un gusto.
¿Q-que dijo?
Dijo que es Callum.
¡Se muy bien que dijo!
Es imposible, no puede ser el, está muy... Diferente.
-Mejor cierra la boca o empezaras a babear -Susurro mi amiga en mi oído- ¿Ese no es el chico que te gustaba a los 13?
No pude hacer mas que asentir, realmente lo tenía en frente y no podía creer lo que veía. Al perecer yo no era la única, ya que todas las miradas estaban dirigidas a el.
La profesora sin entender que estaba pasando enarco una ceja y los interrumpió.
-¿Que está pasando aquí? -
-Es que soy el fantasma de la navidad pasada.
Okey, si era el.
Siempre había tenido ese humor tan característico que me divertía mucho.
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Aunque pase el tiempo
Подростковая литератураDespues de 5 años viviendo en otra ciudad, los padres de Callum habían decidido volver a aquel pueblo donde el había nacido y pasado toda su niñez. Para muchos ser transferido de instituto supondría conocer muchas caras nuevas, pues para el esto ser...