A dónde vayas, te acompañaré [BingYuan Week]

Día 5: Binghe system

El Abismo Sin Fin se había abierto.

Después de un arduo enfrentamiento contra Mobei-Jun, finalmente, el gobernante de los Desiertos del Norte se fue. Pero su fue dejando revelada la herencia demoníaca de Luo Binghe.

Shen Qingqiu no sabía qué hacer.

Sabía que ese día llegaría. Lo sabía desde el principio. Quizás el irse acostumbrando a la vida en ese mundo haya hecho que por un tiempo perdiera la noción de que la historia todavía avanzaba. Pero todavía lo sabía. Llegaría el día en que debería arrojar al protagonista al Abismo Sin Fin por orden del Sistema.

Solo... Solo no se sentía preparado, ¿bien?

Quiso ignorar como los días pasaban de forma extremadamente rápida, quiso ignorar el cariño que le había tomado a Luo Binghe y quiso ignorar el contador que tenía el Sistema y sus constantes recordatorios.

Pero el día iba llegar de todos modos.

Él incluso preparó conscientemente una bolsa de almacenamiento con distintas cosas útiles para Luo Binghe. Por qué debía cumplir su misión.

Entonces, ¿por qué dudaba ahora?

El Sistema seguía descontando el tiempo, advirtiéndole una y otra vez que debía cumplir la misión. Sería el final si no lo hacía. Pero Luo Binghe lo miraba con sentimientos que iban entre la esperanza y la desesperación. Queriendo confiar en su Shizun y al mismo con temor de la decisión que tomaría Shen Yuan.

La duda era algo notoria en su mirada, ¿Luo Binghe debía esperar lo mejor?

¿O no?

Shen Qingqiu soltó a Xiu Ya, la cual antes apuntaba a Luo Binghe a la altura del corazón, la soltó y dio un paso atrás.

Estaría bien si Luo Binghe pensaba que...

Pero Shen Qingqiu volvió a avanzar. Se acercó y una de sus manos ya estaba empujando a Luo Binghe más cerca del borde del Abismo Sin Fin.

Luo Binghe no tuvo tiempo de pronunciar ninguna palabra antes de que su Shizun se acercara lo suficiente para tirarlo y susurrara algunas palabras antes de que cayera por completo.

-Lo siento, cuídate, ¿bien?

Lo último que vio fue una expresión de remordimiento en el rostro siempre tranquilo de su Shizun.

*＊✿❀　❀✿＊*

Luo Binghe perdió la cuenta del tiempo en que había permanecido en el Abismo Sin Fin. No había forma de diferenciar el día y la noche en ese lugar, pero su cuerpo estaba acostumbrado a levantarse y dormir a horas exactas. Aunque, ahora no importaba. Dormir se había vuelto un lujo que le podría costar la vida por bajar la guardia.

Solo parecía haber pasado bastante tiempo...

Al menos su constante movimiento y sus pensamientos concentrados en descubrir maneras de sobrevivir le impidieron atormentarse pensando sobre el por qué su Shizun lo arrojó a aquel lugar. Eso y...

Miró la bolsa de almacenamiento que colgaba de su cintura.

Su Shizun debería haber tenido una razón.

No importaba si ahora todo era duro, si vivir solo un día más se consideraba un milagro, si había ocasiones en donde su cuerpo quisiera desfallecer por las duras condiciones en las que estaba.

Él debía volver.

De alguna manera lograría volver.

Una vez saliera buscaría a su Shizun y pediría las respuestas que tanto quería.