prólogo.

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(en el Olimpo).

Afrodita caminaba por los pasillos del enorme palacio sin rumbo en general estaba aburrida porque no había podido tener una aventura con un hombre decente durante un largo tiempo y los hombres que se ofrecían a complacerla ya la habían aburrido y no lograban satisfacer su lujuria por su camino sin darse cuenta llegó a una de las arenas de entrenamiento de gladiadores y vio al único dios joven del Olimpo con el que nunca estuvo en la cama Hércules el héroe más querido de Grecia y al que más admiraban adultos niños y jóvenes por igual por sus hazañas heroicas y por su voluntad de acero que nunca se quebraba estaba entrenando con el dios de la guerra Hares.

La diosa rubia ignoro al dios de la guerra y simplemente su mirada se enfoco en el semidiós pelirrojo más específicamente en lo bien trabajado que estaba su cuerpo con sus enormes músculos tonificados al descubierto lo que encendió la lujuria en el cuerpo Afrodita que se estaba preguntando si estaba igual de bien dotado en la parte de abajo como en su zona superior.

Mente de Afrodita: aaaa desearía qué no fuera tan reacio a tener una pequeña aventura con migo.

Para mala suerte de la lujuriosa mujer Hércules era ese tipo de hombre que jamás profanar y a La pureza de una mujer Aún si está se lo pidiera ya que iba en contra de sus principios además de que según el esperaría a la mujer correcta de la que se enamorara y que solo él sabía cuando eso sucedería por lo que cada mujer no solo del Olimpo sino también de otras partes de los cielos fueron negadas cuando le pedían una noche de pasión al pelirrojo.

Afrodita: al diablo no he tenido nada de diversión en mucho tiempo sea por voluntad o a la fuerza disfrutaré de ese cuerpo musculoso esta noche.

Con eso la rubia con una luz blanca hizo aparecer un frasco con un líquido color rosa y bajo hacia dónde estaban practicando los guerreros qué parecían no darse cuenta de su presencia la rubia vio las copas de agua sobre una mesa de madera obviamente para cuándo terminarán de entrenar vacío líquido color rosa completamente en una de las copas de oro qué hicieron que el agua se tornará del mismo color por un breve momento, pero había vuelto a la normalidad casi al instante puso su mano arriba de la copa en la que había vaciado el líquido y moviendo un poco los dedos hizo caer unos pequeños polvos blancos sobre el agua y así Afrodita había creado un elixir de amor qué haría que por lo menos durante 24 horas el semidiós griego no pudiera negarse a sus deseos aún siendo tan fuerte de voluntad cómo lo era tomo las Dos copas de oro y se acercó a dónde los hombres peleaban.

Afrodita: creó qué ustedes dos necesitan un pequeño descanso para hidratarse.

Los dos combatientes detuvieron su pelea cuándo vieron a la que era considerada la diosa más hermosa en general acercarse a ellos con sus copas de agua y extenderse las y para no parecer groseros ambos las tomaron

Hércules: bueno gracias Afrodita.

Hades: si gracias.

Tomaron en líquido hidratante y cuando terminaron le devolvieron las copas a la mujer la rubia sonrío cuando vio que su objetivo se había bebido hasta la última gota de su trampa.

Hércules de un momento a otro comenzó a sentirse mareado mientras su vista se enfocaba en Afrodita sentía un leve temblor en las piernas como si estuviera perdiendo su fuerza.

Hades se dió cuenta de eso y pensó que tal vez habían entrenado de una forma exagerada el día de hoy estaba a punto de preguntarle a Hércules si le pasaba algo, pero Afrodita se le adelanto dirigiéndose rápidamente hacia el hombre de ojos azules y posando sus manos preocupadamente sobre su pecho musculoso.

Afrodita: re encuentras bien Hércules.

Hércules: si.... Estoy.... Bien Solo.... un poco mareado.

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