one.

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hyunjin se tiró boca arriba sobre su colchón. por fin había llegado a su hogar luego de estar desde las ocho y treinta de la mañana en aquella cárcel que tenía como escuela, lo único que aliviaba sus pensamientos era que aquél año finalmente se graduaria, dando paso a otra pesadilla más: la universidad.

luego de unos cinco minutos pensando en su existencia se levantó de su cómoda y gran cama para despojar sus ropas de su sudado cuerpo —debido al calor que hacía y que había caminado hacia su casa unos veinte minutos— se dio una ducha relajante y algo helada para refrescarse. se estaba vistiendo con ropa más cómoda que el uniforme cuando escuchó el timbre de su casa sonar.

bajó en sus pantuflas hacia la puerta de entrada ya vestido, abriéndola segundos después encontrándose con su mejor amigo: seo changbin. quién ya no traía la vestimenta de la escuela y en sus manos en vez de cuadernos tenía una bolsa con —lo que suponía hyunjin que era— comida chatarra y demás cosas para pasar la noche y el fin de semana.

 quién ya no traía la vestimenta de la escuela y en sus manos en vez de cuadernos tenía una bolsa con —lo que suponía hyunjin que era— comida chatarra y demás cosas para pasar la noche y el fin de semana

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—ay, por favor hyunjin, es todo muy falso. la sangre es muy roja y la real no es así. — comentó el más bajo de ambos mientras veían una película de terror que había puesto hyunjin, la cual según changbin era mucho más mala que aquella que había mirado con jisung que se trataba sobre pantalones asesinos.

—claro que no es mala, sólo que tú eres muy detallista con una película tan barata. — sonrió el rubio más alto al ver como su mayor tenía su ceño fruncido y un leve puchero en sus labios.

lindo.

—no puedo creer que me hayas puesto a mirar esto sólo porque según tú la protagonista tiene buenos pechos. — changbin soltó mientras sacaba la película de la pantalla para luego mirar a su amigo.

—veamos mejor la nueva que salió de michael myers. — sonrió en grande con un leve brillo en sus ojos.

—changbin por favor, la fuimos a ver al cine dos veces y en tu casa la vimos tres veces, ¿sigues queriendo verla?
— se quejó el menor tirándose de espaldas en su cama sintiendo como su enano amigo posaba su cuerpo sobre el suyo y apoyaba su cabeza contra su pecho, algo sumamente normal entre ellos.

—es que me gusta mucho y sólo contigo puedo verla, ya sabes, jisung ahora está mucho más ocupado desde que tiene novio. — murmuró con una leve tristeza. sus manos se posaron sobre el pecho del rubio bajo de él y apoyó su mentón en ellas, nuevamente sonriéndole.

hyunjin al ver su sonrisa y sus ojos haciéndose pequeños por la misma, sin contar el brillo que tenían sólo supo sonreír de igual manera, acariciando sus cabellos con una de sus manos antes de enderezarse para poner "halloween kills" otra vez.

—lo que hago por ti. — susurró al ver cómo comenzaba la película, sabiéndose de memoria cada escena.

—me consientes por ser tu mejor amigo desde los siete, aparte yo nunca me quejo cuando tengo que prestarte mi motocicleta para que salgas con tu noviecita. — changbin hizo un sonido de desagrado en la última palabra que soltó, ya que la novia de hyunjin, sana, no le agradaba del todo y el rubio más alto aún no entendía el porqué de eso.

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