Parte 4. El bien contra el Mal

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Ambas representaciones máxima de los mundos de oscuridad y luz combatían pero destruían su dimensión al mismo tiempo, el espacio entre el cielo y la tierra comenzaba a hacerse más pequeño, algunos que vivían en montañas y tenían tormentas sobre ellos fueron asesinados por los rayos pues las nubes comenzaron a cubrir sus ciudades. De pronto comenzaba a hacer mucho calor y los muertos comenzaban a verse como personas normales de nuevo.

Virium se dio cuenta de eso, tenía que hacer algo al respecto así que dejó de disparar su energía y evito el ataque de Tallis siguieron combatiendo pero ninguna ganaba así que Virium usó un truco. Creó miles de copias de sí misma y se acerco a Tallis por las espalda para dejarla inconsciente y acceder a su interior, dentro de ella estaba un ente, era el mismo Lucifer el único miedo de Virium. En cuanto Virium soltó a Tallis la actitud de ella cambió y miraba a Virium de forma diferente.

-Entonces ya sabes quien soy-dijo Tallis

-¿Por que hacerlo? Es una niña-Respondió Virium

-¿Por que no? Ella tomó una decisión, probar el lado del mal, le costó caro- dijo Tallis.

Ambas combatieron a muerte hasta que la fuerza de Tallis fue demasiada y Virium cayo al suelo cansada del combate, entonces Bedelia y el brujo Anciano fueron a ayudarla.

-Le ayudaremos gran diosa-dijo Bedelia.

-¡No! Es demasiado fuerte-respondió Virium

-Es una niña, seguro que podremos-dijo el anciano.

-No podremos...ella está poseída por el espíritu de Lucifer-dijo Virium.

-Es imposible- dijo Bedelia asustada y con la voz quebrada.

-Tengo que buscar la forma de vencerlo con su poder y el de Tallis juntos será complicado derrotarlo- dijo Virium preocupada.

-Tal vez no hay que vencerlo, solo detenerlo- respondió el anciano.

-¿De que habla señor?- preguntó Bedelia.

-Hay que encerrarlo en alguna prisión- dijo el anciano.

-No hay contenedor celestial que pueda almacenar a un demonio como Lucifer- respondió Virium mientras se levantaba del suelo.

-No un contenedor celestial, un cuerpo de carne y hueso es la prisión de los barrotes más resistentes, tenemos que hacer que el cuerpo de Tallis sea inutilizable- dijo el anciano.

-Bien, entonces solo hay que conseguir un conejo o algo así para encerrar a Lucifer ¿No?- preguntó Bedelia.

-No voy a liberar a un demonio así para pasarlo a otra prisión, tendrá que ser esa niña quién tenga que contener a Lucifer- dijo Virium molesta.

-¡De ninguna manera! No permitiré que una bruja como ella muera por culpa de ese sujeto, hay que matarlo a él entonces, gran brujo dígale algo- dijo Bedelia molesta.

-No podemos cambiar el plan, muchas veces el camino más fácil no es el correcto, pero viendo nuestra situación...no quiero que muera más gente Bedelia, si no vas a cooperar ayuda a los demás, protégelos- respondió el anciano

-Además no puedes matar a un demonio deidad, es como intentar matar a un dios- dijo Virium.

-¿En serio me están diciendo que matarán a una niña?- preguntó Bedelia con la voz quebrada.

El anciano leyó el libro de hechizos "Lamentos que escucho, espíritus que veo, cadenas que cargan, denme su fuerza" con un simple movimiento de manos el anciano creo grande cadenas de oro brillante que atraparon a Tallis, ella se retorcía y agitaba con tal de salir pero así Virium pudo entrar a su mente, todo estaba oscuro y de pronto se escuchó un grito y se alzó una gran sombra con ojos y una boca de color rojo

Corona de sangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora