Querido Hermanastro [BakuShima]

Prólogo

Si Katsuki pudiera describir su vida en una sola palabra antes de que su padre se casará sin duda diría que perfecta. No es como si su vida fuera una mierda ahora pero, había unas cuantas reglas y costumbres que no le parecían en absoluto agradables.

En primer lugar ya no podía comer mucho cosas picantes, ni mucho menos podía escuchar rock a todo volumen.

También tenie que compartir todas las comidas con su familia en la mesa y no en la comodidad del sillón mientras ve la televisión.

Y sin duda lo peor era ver cómo la boca su padre era devorado por el mitad y mitad que era su padrastro.

Esas eran las peores cosas de su no tan larga lista. Que lastimosamente solo se habían formado en un mes de convivencia.

Maldecia el día en que su papá en medio de la comida le comentaba que estaba conociendo a alguien, por su puesto que se sorprendió debido a que su padre nunca había salido con alguien o menos una aventura, pero lo dejo pasar diciéndole que estaba bien. Era su hijo no dueño para prohibirle salir con alguien.

Además cruelmente pensó que eso no iba a durar puesto que su progenitor era un nerd friki. No creía que alguien se fijaría en él.

Pero que tan equivocado, ya que cinco meses después su papá no paraba de hablar de «Todoroki» (apellido que le resultaba familiar) alias "el roba papás" como el le había apodado, diciéndole que tenía ganas de conocerlo; idea que rechazo inmediatamente.

¿Porque carajos tenía que conocer al roba papás? Vale, si sabía la respuesta pero no quería.

No es que no quisiera apoyar a su papá pero se sabía las historias de los padrastros malos que hacían que los hijastros terminaron botados de sus casas, no quería eso para él. Su papá Izuku habló con él diciéndole que eso no pasaría, que si al final tenía que elegir entre su pareja o su hijo por supuesto que lo elegiría a él: su hijo.

Un poco más tranquilo y confiado aceptó conocer al roba papás, eso sí. Con la condición que si no le agradaba no volvería a salir a convivir con él.

Aunque se imagino varios escenarios desastrosos y uno bueno, no se imagino que el novio de su papá fuera bastante atractivo y un tanto educado.

Lo trataba con educación, sabiendo que el tenía que darle el visto bueno y aprobación.
Hablaron para conocerse, bueno más bien su papá y Todoroki eran los que llevaban la conversación puesto que solo cuando era necesario respondía a las preguntas o comentarios.

Eso sí, prestando atención a todo.

Todoroki Shoto era hijo del famoso empresario Todoroki Enji, por esa razón se le había hecho familiar el apellido cuando escucho hablar sobre él. Tenía treinta y siete años, dos años mayor que su papá, cosa que no le importó mucho si no lo que dijo después.

Tenía un hijo. Un chico de su edad.

Pues con razón su papá había congeniado con él, ambos eran papás solteros.

Pero igual le importó menos.

Sí, probablemente pronto tendría que conocer a su futuro hermano pero ese sería problema del Katsuki del futuro.
Después de eso todo resultó bien, no solo salió con la idea que su padre se veía bastante bien con Todoroki si no también una bolsa de regalo con dulces picosos provenientes de México.

Un par de salidas entre ellos tres bastaron para aceptar oficialmente el noviazgo de su padre con el "mitad y mitad" como ahora lo había apodado. El problema se vino cuando tendría que conocer al hijo de este, su papá dijo que Eijiro cómo se llamaba el chico, era una buena persona.

Tuvo que aceptar diciendo que el encuentro fuera en la su casa a la hora de la comida, ya que si algo no estaba mal podía darse el lujo de correr los o encerrarse en su habitación.

La comida fue una tarde en la que precisamente el salía de la escuela y para rematar regresando a casa casi corriendo puesto que el metro había sufrido un problema a mitad de camino.
Le había avisado a su padre el motivo de su tardanza, recibiendo como respuesta que no se preocupara.
Ni bien entró escucho la voz de su padre y de los invitados, avisó que ya había llegado comenzando a dirigirse hacia las escaleras diciendo que bajaría en un momento.

Rápidamente se había bañado y vestido para bajar a conocer a su hermanastro, el cuál fue el primero en darse cuenta de su presencia.

Las presentaciones comenzaron mientras el miraba al chico, no había nada en especial en él. Solo lo raro que no se parecía absolutamente en nada a Todoroki, no tenía el cabello blanco ni rojo ni mucho menos los ojos azules o grises, al contrario tenía el cabello largo negro y ojos rojos negras de unos lentes de marco negro.

También notó que el chico era muy tímido puesto que parecía un niño pequeño agarrado del saco de su padre mirando el suelo, con un sonrojó en las mejillas.

Le daba un poco de ternura.

Se presentó llamándose Todoroki Eijiro, diciendo también que esperaba que se llevarán bien.

El aceptó.

Poco después tuvo que acostumbrarse a la presencia de Eijiro y Shoto en su casa, también la incomodidad de conocer a la familia Todoroki.

Detalles de los cuales no prefiere hablar, para no tener que recordar lo incómodo fue.

Un año después su padre anuncio su matrimonio, el cuál le tomo por sorpresa. Puesto que en verdad creía que todo terminaría pronto y volvería a ser el y su padre, disfrutando de la vida de solteros.

Que equivocado estaba.

Pero lo aceptó, su papá era feliz el también lo sería.

Tal vez no estaba listo para un cambio tan enorme pero si su esfuerzo podía ayudar a que su papá estuviera con esa sonrisa haría el esfuerzo por él.

—Katsuki, dice mamá que la comida ya está lista— se escucha tras la puerta.

Deja el lápiz que sostiene para dirigir su vista hacia ella.

—Ya voy— contestó.

Soltó un suspiro para dejar el lápiz y encaminarse hacia la puerta.

Que dios le diera fuerza que probablemente se volvería loco.

Nota: Antes que nada, está idea ya la tenía escrita por pedazos, solo era cuestión de unirlos.

Esto es casi una versión de Mi Hijo, pero aquí los protagonistas son más grandes. También quería a Kiri con otro estilo y me gustó más la que tendrá aquí.

Ya pronto habrá actualización de mis demás fics. 

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