Pequeño Zorro

I.- Zorros Huyendo

Mieczyslaw Stilinski nació en una pequeña manada de zorros. Su madre una mujer zorro bastante fuerte y alfa mientras que su padre un humano con un linaje de brujos que se saltó una generación. El pequeño era un ser bastante poderoso siendo no solo un hombre zorro sino que también era un brujo, un híbrido con poderes extraordinario pero que le tomaría tiempo aprender.

Cuando cumplió los tres años los cazadores atacaron a la manada.

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Noah corría lo más rápido que podía mientras que su esposa en su forma de zorro completo corría a su lado, su pequeño se aferraba a su camisa. Ninguno de los miraba hacía atrás, el humano tenía una mochila con todo lo que necesitarían por un tiempo.

Una vez a salvo en una pequeña madriguera, Claudia volvió a ser humano recibiendo con una sonrisa la ropa que su esposo le entregaba.

- Necesitamos encontrar un lugar seguro para cuidar de Mica, no podemos huir para siempre – dijo Claudia mientras se colocaba su ropa

- Por el momento lo mejor será quedarnos aquí, necesitamos descansar y esperar a que los cazadores se alejen lo suficiente – dijo Noah viendo como su hijo sollozaba en una esquina - ¿Mica?

El pequeño gimoteo con fuerza y de un momento a otro tuvieron una cría de zorro hecho bolita ocultando su hocico en su colar esponjada y peluda.

- El shock provocó que se convirtiera por primera vez – dijo Claudia con tristeza mientras acariciaba a su hijo, el pequeño zorrito se dejó cargar por la mujer

- ¿Cuánto tiempo estará así?

- No lo sé, depende mucho de él pero las transformaciones a una edad tan temprana son difíciles de controlar además de que es la mejor manera para poder sobrellevar todos los sentimientos que tenemos y si llega a ser herido tomará esta forma porque también sanamos más rápido aunque sabes que no lo hacemos por completo – le dijo Claudia suspirando cuando su hijo dejó de temblar

- Las cosa serán mucho más complicadas, ¿no es así?

- Eso temo – respondió Claudia con la mirada fija en su pequeño

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Le tomó todo un año al pequeño Mieczyslaw en tomar su forma de humano de nuevo.

Vivieron los siguientes años huyendo de los cazadores aunque por un tiempo consiguieron un poco de paz en un pequeño pueblo prácticamente desierto.

Mieczyslaw cumplió los trece años y ya sabía manejar la magia bastante bien, aprendió gracias a los libros que su padre había podido llevarlos, el ahora puberto había demostrado una gran inteligencia así que sabía perfectamente que ocurría y porque corrían sin parar.

- Mamá – le llamó el menor mientras recogían algunas verduras del pequeño cultivo que tenían - ¿Alguna vez tendremos un hogar?

- Mi pequeña travesura, el hogar no es un lugar son las personas que amas y que te hacen sentir seguro

- ¿Una manada?

- Así es, la manada huele diferente a los demás, te da calma con solo su presencia

- ¿Tendremos una manada más grande? Amo estar contigo y papá pero me aburro

Claudia rio ligeramente por el puchero de su hijo y lo entendía, quería más que anda darle una vida normal y que tuviera amigos.

- Espero que podamos tener una y puedas tener muchos amigos además de personas que te cuiden y te amen tanto como papá y yo lo hacemos – le dijo la mujer besando la frente de su hijo

- ¡Corran! – gritó Noah mientras corría hacía ellos y miles de flechas eran lanzadas

- Papá – exclamó Stiles asustado pero tomó con rapidez las cosas que siempre tenían preparadas y comenzó a correr pero se detuvo cuando su padre fue herido en la pierna así que regresó y lo ayudó a corre

- Vete Mica, váyanse sin mi – le dijo Noah con temor

- ¡No! Jamás dejaré a papá – dijo el pequeño frunciendo el ceño mientras corría

Claudia corrió hacía ellos tomando a Noah del brazo y cargándolo con la ayuda del pequeño solo que la mujer gruñó cuando una flecha se enterró en su costado.

- No mires atrás Mica, solo sigue adelante – le dijo Claudia soportando el dolor

Unas horas más tarde llegaron a un cartel y sintieron una energía cubrirlos cuando lo pasaron, era reconfortante y cálida.

Bienvenidos a Beacon Hills.

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La familia Stilinski ahora reposaba en el hospital, Claudia sobre una cama de hospital mientras que Noah a su lado abrazándola con cuidado mientras que Stiles al lado de su padre.

Cuando cruzaron el cartel a pocos kilómetros fueron encontrados por una patrulla que los llevó al hospital donde los atendieron. Claudia solo podía rogar a los cielos que no fuera verdad pero podía sentir el dolor recorrer cada parte de su cuerpo.

Ese día la familia Stilinski tuvo su momento de paz pero solo sería momentáneo porque su felicidad duraría menos de lo que pensaba. 

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Hola! Espero que les guste la historia, la idea fue dada por @Koci1ara

Ella me pidió si podía desarrollarla dándome las pautas que quería y aquí estamos, espero que la disfruten tanto como yo al escribirla.