Parte 8: Rabia

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Aquel día no dormí con la fácil tranquilidad con la que solía dormir, tuve pesadillas toda la noche, todas sobre lo mismo; Jack. En una me peleaba con Rose y el venía y la ayudaba, en otra, yo me caía del techo de la catedral y al caer sobre el ángel el venía y me tiraba al vacío...todas así de "bonitas".

Me desperté sin ganas de ir a la escuela, no quería tener que ver a ninguno de los dos, porqué por un lado quería recriminarle a el, el que me hubiese hecho ilusiones, pero, por otro lado, no podía, no eramos nada, así que no podía recriminarle nada.

Llegué al colegio, noté en seguida la ausencia de Rose, ella nunca dejaba sola a Aqua, pero hoy lo estaba, y creo que ella notó que la estaba mirando, porqué comenzó a caminar directa hacía mí, nunca me había fijado pero Aqua caminaba como si el suelo fuese una pasarela, bueno quizás no tan exagerado, pero si que su forma de mover sus largas piernas me recordaba a una modelo, no quería estar mal con ella por culpa de su estúpido primo, así que decidí que iba a pedirle perdón, después de todo ella había tenido razón al aconsejarme que no me acercase a Jack, nunca debí haberlo hecho.

-Nora...-empezó Aqua.

-No-interrumpí-antes de que digas nada...quiero decirte que...-un nudo en mi garganta no me dejaba hablar claro-lo siento...tenías razón sobre Jack...-mis ojos se comenzaron a empañar-nunca debí haberme acercado a el...-mi voz sonaba rota, y no pude evitar comenzar a llorar.

-No...no llores-Me abrazo Aqua-¿que ha pasado? ¿Que te ha hecho?

-Es que...no me ha hecho nada en realidad, simplemente ha estado con Rose, cuando el me había hecho pensar que me quería a mí.

-Hola-interrumpió la voz de Jack.

-Tu y yo vamos a hablar-le dijo Aqua cojiendolo de la oreja y arrastrándolo lejos. Esa escena fue tan cómica que me hizo dejar de llorar.

Me dirigí corriendo hacía el lavabo, me limpié la cara para que no se me notara que había llorado, des de el espejo vi que una chica con el pelo oscuro bajita y delgada entró en el lavabo.

-Oh, vaya pobre has estado llorando-dijo la chica mirando mi reflejo en el espejo.

-No...yo...-Intenté.

-Mira yo me se un truco para que no se vean las marcas, toma-dijo alargando un pequeño pañuelo de su bolso-has de coger y poner el pañuelo en el lagrimal y pasarlo por la zona en la que salen las ojeras, ahora ponemos un poco de esto-dijo sacando unos polvos de su bolso-no mejor un tono un poco mas oscuro-dijo sacando otros muy parecidos-los pasamos por la zona entre el ojo y el pañuelo y...listo! Ahora ya no se te nota.

-¡Vaya! gracias, eres muy buena con estos trucos.-dije mirándome en el espejo

-Bueno no es nada comparado con los demás de la clase de escenografía.-dijo pasando por detrás de mi.

-Bueno gracias, adiós me voy antes de que suene la campana-dije girándome hacía ella, cuando vi que no estaba-¿hola?-nadie respondió.

Salí de allí confusa y me dirigí hacía el aula de tutoria, cuando la campana sonó. Entré por la puerta, la profesora Willsmurth aún no había llegado, me senté en mi sitio, noté como alguien me miraba, fijamente, me giré, sabía que iba a ser el pero me había hecho ilusiones de que solo fuese alguien a quien le cayese mal, gesticuló con la boca, no me esforcé en entender lo que decía, me volví a girar, entonces oí como la silla de mi izquierda, que normalmente ocupaba Rose, se movía, me giré, el había aprovechado que Rose no había venido para sentarse en su sitio.

-¿Que quieres?-dije en el tono mas borde que pude para estar susurrando.

-¿Por que no me habías dicho que te gusto?-susurró en respuesta.

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