Creo que la cocina es el lugar del mundo que mas me gusta. En la cocina,no importa de quien ni como sea,o en cualquier sitio donde se haga comida,no sufro. Si es posible prefiero que sea funcional y que esté muy usada. Con trapos secos y limpios,y los azulejos blancos y brillantes.
Incluso las cocinas sucísimas me encantan.
Aunque haya restos de verduras esparcidos por el suelo y esté tan sucio que la suelas de las zapatillas quede ennegrecida,si la cocina es muy grande,me gusta. Si alli se yergue una nevera enorme,llena de comida como para pasar un invierno,me gusta apoyarme en su puerta plateada. Cuando levanto los ojos de la cocina de gas grasienta y del cuchillo oxidado,en la ventana brillan estrellas solitarias.
Solo estamos la cocina y yo. Pero creo que es mejor que pensar que en este mundo solo estoy yo sola.
11Cuando estoy agotada suelo quedarme absorta. Cuando llegue el momento, quiero morir en la cocina. Sola en un lugar frío, o junto a alguien en un lugar cálido,me gustaria ver claramente mi muerte sin sentir miedo. Creo que me gustaría que fuese en la cocina.
Antes de que me acogiera la familia Tanabe,dormia siempre en la cocina. Una noche en que no podía conciliar el sueño,sali de mi habitación y busque un lugar comodo. Me di cuenta, al amanecer, de que dónde mejor podía dormir era junto la nevera
Yo,Mikage Sakurai, soy huérfana. Mis padres murieron jóvenes. Me criaron mis abuelos. Mi abuelo murio en la época de mi ingreso en la escuela secundaria. Desde ese entonces,vivíamos solas mi abuela y yo.
Hace poco murió mi abuela inesperadamente. Me asuste
La familia,esta familia que realmente he tenido,fue reduciéndose poco a poco a lo largo de los años, y ahora, cuando recuerdo qué estoy aquí,sola,todo lo que tengo ante ojos me parece irreal. Ahora,en la habitación en la que nací y crecí,me sorprende ver que el tiempo ha pasado y que estoy sola.
12Como en la ciencia ficción. Es la oscuridad del universo.
Despues del entierro estuve cómo ausente tres días.
Yo arrastraba suavemente un sueño tranquilo que acompañaba a una tristeza inmensa sin hacerme apenas derramar lágrimas, y extendí el futon* en la cocina que brillaba en silencio. Como Linus,dormí envuelta en una manta. El zumbido de la nevera me protegía de los pensamientos de soledad. Allí,la noche,larga,paso bastante sosegada y llegó la mañana.
Sólo quería dormir bajo estrellas.
Sólo quería despertarme con la luz de la mañana.
Todo lo demás, simplemente,fue pasando despacio.¡Pero yo no podia seguir así! La realidad es dura.
Mi abuela me había dejado algún dinero,pero el apartamento era demasiado grande para una persona sola y tenía que buscar otro.
Que remedió. Compre una revista de apartamento +(* Futon: cama japonesa que consta de un colchón y de un edredón)
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+ de alquiler y la hojeé,pero al ver,uno tras otro,tantos apartamentos parecidos,me mareé. Una mudanza es un trabajo pesado. Hace falta fuerza.
No me sentía bien. Tumbada todo el día y noche en la cocina,tenía el cuerpo entumecido, y tampoco me importaba me importaba aclarar mis ideas. Total,para ir a ver apartamentos,trasladarme,solicitar el teléfono...
Enumerando todas las dificultades que se me ocurrían,me desanimaba y me pasaba los días sin hacer nada. Fue entonces,lo recuerdo muy bien,cuando el vino como un milagro caido del cielo.-¡Ding-dong! -el timbre sonó inesperadamente.
Era una tarde de primavera un poco nublada. Harta ya de hojear revistas de apartamentos,estaba empaquetándolas con una cuerda. De todos modos tenía que mudarme. Salí corriendo atolondrada con una especie de camisón y,sin pensar descorri el cerrojo, abrí la puerta (no era un ladrón,por suerte) y allí estaba Yūichi Tanabe.
-Te agradezco lo del otro día -dije.
Era un chico muy amable,un año menor que yo. Me ayudó mucho el día del funeral. Me14
dijo que estudiaba en la misma universidad que yo. En aquella época yo no iba mucho por clase.
-No tiene importancia -dijo-. ¿Has decidido ya donde vas a vivir?.
-No aún no -y sonreí.
-Me lo imaginaba.
-¿Por que no entras? ¿Te apetece un té?
-No. Ahora tengo prisa -sonrió-. He pasado un momento a decirte solo una cosa. Lo he estado hablando con mi madre. ¿Quieres vivir una temporada en casa?
-¿Qué? -dije
-De todos modo, pásate por casa esta noche alrededor de las siete. Mira, te he hecho un plano.
-Sí -cogi el papel, confusa.
-Bueno, entonces hasta luego. A mi madre y a mí nos encantaría que vinieras, Mikage.
Sonrío. Cómo su expresión era alegre, me quede mirándolo fijamente a los ojos , allí de pie en el recibidor que tan acostumbrada estaba a ver. También era por que había dicho mi hombre tan inesperadamente.
-Bueno, sí...., iré a verlos, sea como sea.
Por un momento me había tentado su ofrecimiento. Su actitud, muy serena, me hacía confiar en él. En la oscuridad que se cerraba delante de mis ojos se veía como un camino seguro que15
brillaba con una luz blanca. Por eso habia hablado así.
-Hasta luego -dijo sonriendo, y se fue.
Hasta el entierro de mi abuela apenas lo conocía. Aquel día, cuando Yuichi Tanabe vino, me pregunté, de verdad, si no había sido el amante de mi abuela. Mientras quemaba incienso le habían temblado las manos y cerró los ojos llorosos. Al mirar la fotografía de mi abuela, volvío a derramar lágrimas.
Parecía tan triste que, por un momento pensé que quería mas a mi abuela que yo.
Enjugándose las lagrimas con un pañuelo, había dicho:
-Dejame que te ayude.
Y me ayudo mucho.
Yuichi Tanabe
Debia de estar aturdida, porque me costó recordar cuando habia dicho mi abuela aquel nombre.
Trabajaba en la floristería a la que mi abuela solía ir. Recuerdo que decía a menudo
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Banana Yoshimoto - Kitchen - Español
Fiksi RemajaCuando se le muere la abuela,la jovencísima Mikage queda absolutamente sola en una casa demasiado grande y se refugia en la cocina,pues solo en ella se siente a salvó (El lugar donde mejor se duerme es junto a la nevera,confiesa). Pero un día ocurre...