Ese Día

no SOS kardia

Camus: te lo prometí y voy a cumplir. Te sigo hasta el Hades, no me importa si duele, al lado tuyo solo hay felicidad. Mil vidas Milo, no te olvides... también me gustas Milo, te amo desde que te conocí, siempre vas a hacer mi bicho mañoso, solo mejórate por favor...
Shion: Camus podes salir?
Camus: no, el está durmiendo
Shion: Camus es una orden
Camus: ya vengo Mon amour. Que pasa?
Mu: entendemos que estás enojado pero el está mejor
Camus: para esto me llamaron?!?!
Shion: desobedeciste una orden directa Camus! Dónde está tu responsable?!
Camus: al lado de Milo! Ahí es! Si quiere castigarme hágalo después, le regaló mi armadura pero ahora me importa más su vida que la mía!!!
Aioria: no estás exagerando!
Camus: no...
Shion: el no es kardia y lo sabes...
Camus: usted que sabe?!?! Nadie lo está acompañando, ni siquiera entraron a verlo, soy el único que está con el soy el único que....

Mi desesperación aumentaba cuánto más gritaba más me dolía el alma. El patriarca logro entenderme y me abrazo como a un hijo, me sostuve con fuerza y no paraba de llorar. Todos se sorprendieron por mi reacción, jamáz creyeron verme así de humanos. Ellos saben lo frío que soy pero respecto a Milo, soy agua cristalina, el solo puede verme y reflejarse en mi así como yo en el.
Mis piernas empezaron a temblar y me sentía mareado, el suelo se movía y no se que en momento me empezó a faltar el aire. Tuve que sentarme no lograba escuchar al patriarca que me llamaba, me estaba ahogando el pecho me dolía me temblaban las manos, tenía frío. Los caballeros se alarmaron y trataron de ayudarme pero no lograba reaccionar, hasta que sentí un cosmos familiar detrás mío y me quedé dormido...
A las horas logré despertar, estaba en los brazos de Milo y se lo veía muy asustado, estaba llorando. No entendía que pasaba...