Y tú ¿Quién eres? // Akaren.

🌸07🔥

El rubio al mirar como aquél líquido escurría de sus piernas recordó al instante lo qué había sucedido con anterioridad, haciendo qué se calmara un poco aunque la simple idea de haber tenido "Sexo" con un demonio le desagradaba un poco. Caminó hacía el baño para lavar su cuerpo el cuál estaba sudado y llenó de "Néctar de amor".

Los minutos pasaban y el joven aún no salía de la ducha, realmente se estaba tardando. Al salir de aquella habitación se dispuso a secarse y vestirse para ir cómodamente a la cama y quedar profundamente dormido aunque el dolor de cintura que había experimentado se había ido.

A la mañana siguiente

El pilar ya se encontraba afuera en su finca junto a sus discípulos los cuáles estaban practicando arduamente mientras el rubio los guiaba. Una bella voz hizo qué observara a una pequeña mujer con cabello extravagante, tenía un brillante color rosa y unas puntas verdes qué lo adornaban.

???: Disculpe, rengoku -Le decía tímidamente mientras jugaba con su cabello- ¿Cómo se encuentra el día de hoy?

Rengoku: ¡Me encuentro muy bien el día de hoy! Jovencita Mitsuri. -Se dirigió con una gran sonrisa hacía la chica que cambió su semblante a uno más feliz-

Mitsuri: ¡Eso me alegra! Realmente estaba tan preocupada por ti.
- Con una gran sonrisa en el rostro-

Rengoku: ¡Muchas gracias por preocuparte! - Con una sonrisa de oreja a oreja-

El tiempo transcurría con normalidad, la joven pilar del amor y el Pilar de la llama estaban hablando de cosas Triviales hasta qué de un momento a otro se hacía presente el tema del "Amor".

Mitsuri: Rengoku ¿Alguna vez te has enamorado? -Le preguntaba con curiosidad-

Rengoku: ¿Enamorado? Sí la verdad en una ocasión. -Decia algo desanimado pues sabía de quién se trataba- Pero no puedo seguir viendol... -Siendo interrumpido por la chica qué salto frente suya para tomarlo de sus hombros y sacudirlo bruscamente-

Mitsuri: ¡Si estás realmente enamorado! ¡No debes dejar qué nadie los separe! No importa si son diferentes, el amor es algo qué no se da en los árboles

Rengoku estaba siendo Aconsejado por otra persona, cosa que nunca le había sucedido.

Un atardecer se hacía presente y después de pensar muy bien las cosas finalmente acepto los sentimientos encontrados que Akaza le había hecho sentir, levantó su cuerpo de dónde estaba sentado y se dirigió a buscarlo para así mismo confesarle que lo quería aunque eso fuera realmente malo.

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Pido perdón por hacer los capítulos tan cortos.

Pero el fin se está acercando, calculando creó que en 4 o 5 capítulos esto se acabará.✨
*Les da una flor*