Capítulo 9

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Cuando me besa pienso en quitarme. Pero siento el calor de su piel. Me besa con delicadeza. Con cariño.
Cuando termina de besarme se retira y dice:
-¡Dios mío Ema! He querido hacer esto desde el primer día que te vi entrar por esa puerta.
No sé qué decir, estoy en shock. Quiero darle un golpe, pero sin en cambio hago otra cosa que a Rob y a mí nos sorprende.
Me abalanzó un poco contra él, tomó su cabello entre mis dedos y lo beso desesperada.
Los vampiros podemos llegar a ser demasiado intensos.
-Chicos luego se declaran su amor por favor pasen a su lugar. –dice alguien quien no conozco.
El comentario de la maestra me hace poner los pies en la tierra, todos nos miran.
Apenada paso a mi lugar.
En todo el día evitó a Rob no sé qué me paso y necesito sacar conclusiones.
A la hora de la salida intento irme rápidamente, pero Rob lo evita.
-Hey! –grita.
-¿Qué quieres Rob? –digo bruscamente.
-Tenemos que hablar sobre lo que paso hoy. –me pide.
Me pongo muy nerviosa al recordarlo y en un susurro contestó:
-No hay nada de qué hablar, solo fue un beso. Se lo pude haber dado a cualquier otra persona.
Dios mío soy una mentirosa. No habría besado a cualquier persona. Al decir eso, espero que Rob por fin me deje de hablar.
-Mira Ema me encantas. Lo que te voy a decir, solo lo voy a decir una vez después lo tendrás que decir tu porque de mí ya no va a depender. ¿Quieres ser mi novia? –dice rápidamente, pero lo noto un poco nervioso.
¿Es cierto lo que estoy escuchando? ¿Tan rápido?
-Rob tengo que pen... Tengo que pensarlo.
-Te doy hasta el Lunes preciosa.
Y sin que yo pueda decir algo él se acerca a mí y me besa nuevamente.


*****


Cuando llegó a mi casa corro hacia el teléfono y le marco a Emily.
-Bueno... Oh Ema eres tú! ¿Qué paso hoy con Robert? –pregunta desesperada.
-No lo sé sólo me beso. Y en la salida me dijo que si quería ser su no...
Emily ni si quiera me deja terminar porque empieza a gritar como loca.
-¡Hey! Me vas a romper los tímpanos. Tranquilízate. –digo quejándome pero a la vez riéndome.
-Lo siento pero es que eso es genial. Obvio le dijiste que sí, ¿no? –pregunta emocionada.
-Le dije que lo iba a pensar. –confieso.
- ¡Pero por qué! A ti te gusta Robert ¿no? –me cuestiona.
-Pues sí. –admito.
- ¡Ahí está! No veo la razón por la que le tengas que decir que no.
¡Porque soy un vampiro! No me puedo enamorar, no soy buena para él.
-No lo sé Emily lo voy a pensar.
-Piénsalo muy bien Emily. Robert es un chico muy guapo.
-Nos vemos el lunes.
-Bonito fin de semana. –dice en manera de despedida.
-Gracias, igualmente. –digo y cuelgo el teléfono.


*****


Durante todo el fin de semana me pongo a pensar.
Rob me gusta mucho y hace mucho tiempo que no tengo un novio y ya es hora, tengo que olvidar a... Aunque sea vampiro tengo todo el derecho de enamorarme. Pero no sé qué van a pensar mis papás...
Después de pensarlo y pensarlo tomó una decisión de la que espero no arrepentirme. 

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