♡《𝒕𝒉𝒆 𝒇𝒂𝒓𝒎𝒆𝒓》♡ нoρємιη◦

🍑Capitulo único🐮

🍳Take me home, country roads | Yuji Nomi | Susurros del corazón🍼

1982, Derry

El gallo cacarea y el sol comenzaba aparecer entre las colinas. Una brisa fresca levanto las cortinas y despertó aquel que dormía en esa pequeña habitación. El muchacho abrió los ojos al sentir los rayos de luz chocar en su rostro que salían de su ventana; estiró los brazos y sacudió su cabellera anaranjada desordenada. Luego, frotó sus ojos y empezo a buscar sus pantuflas. Finalmente, se quitó el pijama, abrió su armario, se puso su camisa a cuadros y su pantalón vaquero sujetado a un cinturón.

Suspiró al ver las afueras de su casa, los campos y su cultivo de fresas.- Al parecer va ser un buen día.

Bajo los escalones apurado y tarareo una canción. Se detiene en la cocina, prendio la radio y da un toque en el piso con su talón, saca la sartén y los huevos, llena la tetera de agua y busca las naranjas en la pequeña canasta. Fríe mientras menea las caderas al compás de la canción. Sirvió un desayuno espléndido y fue a buscar aquella persona dueña de sus sueños.

Saco a las ovejas que den un paseo, da de comer a las gallinas y recoge un ramillete de flores para decorar la mesa, especialmente que sean las favoritas de su cariño. Ve a la cercanía, el pequeño establo donde se encontraba él, el amor de su vida.

Al entrar al establo, un joven de orejas negras caídas con manchas blancas, unos cuernecitos que sobresalen de su cabeza y una cola enroscada, estaba durmiendo plácidamente, bajo colchones y frazadas cálidas. Junto con una fila de libros y álbumes de recortes y fotografías de más de diez años. Pero mayormente estaba más cómodo a lado de su amado en la cama que ellos compartían desde hace un tiempo. Estaba empapado de sudor por el bochorno de la madrugada, y su cabellera rizada se pegaba a su frente, pero nada de eso le quitaba su deslumbrante belleza.

Hoseok llegó a captar el aroma que rodeaba el cuerpo del azabache. Una loción para espantar a los mosquitos con olor a vainilla. Por las noches lo empapa de esa loción, dándole leves masajes y que solo a él le fue concedido de verlo desnudo.

Se acercó con cuidado al azabache y le susurro al oído:-Cariño, despierta.

Llevaba un puñado de cascabeles amarrados en su tobillo con un lazo de seda rojo que estaba escrito su nombre en cursiva, 𝕵𝖎𝖒𝖎𝖓. Era para no perderse. Hoseok lo había hecho para ambos cuando eran unos niños, el pelinaranja no lo necesitaba, no se perdía tanto en el campo como el azabache. Pero Jimin amo tanto el detalle que lo conservo hasta ahora. Cada vez que iba a un lugar se escuchaba el tintineo como silbidos de cigarras y al danzar por el pastal como canciones de grillos, y Hoseok siendo su acompañante de baile, su caballero dorado de una sola noche estrellada, como solía decirle.

-Despierta, Jiminie.- lo llamó otra vez y besó la mejilla del nombrado.

El azabache hizo caso omiso y él continuó dándole besos muy suaves en los mofletes, en la nariz, en los párpados mientras deslizaba la mano por debajo de la camiseta de rayas azules y blancas horizontales, hasta tocar la pequeña curva del vientre bajo. Jimin ronroneo de felicidad y movió su cola de un lado a otro por las caricias cariñosas de su pelinaranja.

-Hobi, quiero hacerlo.- hablo el híbrido, removiendose entre las frazadas. Levemente abre los párpados y aletea aquellas rizadas pestañas.

Sus ojos celestes cual cielo despejado miraban con ternura al pelinaranja quien estaba dispuesto para cualquier cosa que él le pedía.

-¿Ah? pero lo hicimos ayer por la noche antes de dormir.- mencionó sonando más como un reproche. Aunque, Hoseok nunca se molestaria en repetir en hacer el amor a Jimin.