Familia Soukoku

Mundo

Dedicado a Vrye_siel

El camino era tranquilo, Akutagawa se sentía enfermo, su embarazo no era lo mejor del mu.
ndo pero al fin y al cabo amaba a su hijo, Atsushi veía de vez en cuando a su pareja,- Todo estará bien - susurro esperando que así pudiera calmar a su pareja que solo sonrió,- No me preocupo - dijo con tranquilidad antes de seguir viendo por la ventana.
Dazai y Chuya se encontraban en la parte trasera, Nakahara estaba cansado, no había dormido,- Lo dejamos en la Port-mafia y luego el nos ayudará a que regrese - intento aliviar la tensión de su pareja,- Suena muy fácil - se quejo mientras veía a Shibusawa atado de manos y pies, con la boca amordazada, era imposible que se soltará, en el momento en que Mori llegara con Shibusawa podría extorsionar a la decadencia para que les regresarán a Yoshio, además de salir impunes de todos estos problemas, el contrato se cerraría casi enseguida, pero era demasiado sencillo, lo mismo pensaban todos en ese auto, los minutos pasaban y pronto la reunión de las familias comenzarían pero antes de poder hacer algo un auto llegó y choco contra ellos,- ¿Qué? - expreso Atsushi confundido antes de que un arma llegará, era Mark,- Hola - saludo apuntando directamente a dónde estaba Akutagawa,- ¡Frena! - ordenó Dazai a lo que el menor obedeció, - ¡Da la vuelta! Nos iremos por la derecha - el mejor asintió antes de ir en la dirección establecida, una lluvia de balas estaba llegando, lo único que podían hacer era agachar la cabeza,- Es un buen tirador pero busca matarnos como prioridad, debería mejor buscar como tirarnos - explico Ryunosuke antes de cargar su arma y comenzar a disparar, las calles se abrían paso, las personas se ocultaban de todas las formas posibles, Chuya y Dazai no querían ni ver qué sucedía.
- Vayan al barrio Chino - pidió Dazai a lo que Atsushi hizo caso.
Las calles se hacían cada segundo más angostas, solo tenían que salir de ahí para darse el suficiente tiempo de irse ya sin ellos podrían lograr llegar más lejos pero antes de poder hacer algo una bala dió en una llanta, no era la gran cosa hasta que resultó ser una bala con metralleta, diseñadas para entrar dentro de las personas o en este caso objetos, parecen normales hasta que de la nada explotaban dentro, llenas de metralla hacían parecer el interior de lo que fuera como carne molida. La camioneta perdió el control, terminaron por golpearse con un restaurante, - ¿Están bien? - pregunto Dazai, sentía como su cabeza sangraba al igual que el resto de sus heridas se abrían, Shibusawa que estaba en la parte de atrás se encontraba casi intacto, cosa que ciertamente le molestó, Akutagawa sentía como su brazo se había dislocado, Atsushi sentía mucho dolor, sus costillas se habían roto, aparte de tener muchos vidrios incrustados en el brazo izquierdo,- ¿Ryu... Estás bien? - pregunto el menor aún cuando el estaba peor,- Sí... Estamos bien... creo... - contesto antes de tocar su vientre, no sentía dolor o algo que le indicara como en las otras ocasiones que estaba sufriendo un aborto espontáneo,- Chuya-san... - llamo al mayor de edad, al igual que su pareja sentía mucho dolor pero podría resistir,- Estoy bien... El auto aún funciona... - pregunto con gran esfuerzo,- No pero en este lugar había una motocicleta... No la tocamos... - alegó Nakajima mientras veía como sus agresores bajaban,- Akutagawa, ahora te arregló el brazo, Dazai, Jinko, vayan por mi hijo... Nosotros nos encargamos de ellos y de llevar Shibusawa... - exigió Chuya antes de tirar la puerta,- ¿Qué? No vas a hacerlo, puedo resolverlo - intento detenerlo Dazai pero Nakahara negó,- Júrame que nuestro hijo estará a salvó, tu eres el único que podrá negociar con basuras como ellos - rogó a su esposo antes de salir y sacar a Akutagawa,- No lo hagas - pidió a su pareja,- Estaremos bien - aseguró a su pareja antes de que Chuya colocará su brazo en su lugar,- ¡Saben lo mucho que trabajo Jinko para pagar esa camioneta! - gritó el mafioso antes de tomar a su fiel Rashomon y dar un disparo al aire como advertencia por otro lado el más bajo saco su fiel cuchillo,- ¡Les dije que no le pusieran una mano encima a mi esposo! - exclamó, necesitaban ser lo suficientemente ruidosos para darles la cortina de humo perfecta a sus parejas que salieron antes de tomar la motocicleta, era de entregas pero irían tan rápido como pudieran,- ¿No crees que enojado se ven lindos? - cuestionó con cierto tono meloso Dazai,- Mientras no sea con nosotros lo son... - susurro Atsushi,- Olvide lavar los trastes, así que evitemos que tenga otra razón para matarme - luego de eso se fueron, aún tenían el aparato de rastreo.