No logro vislumbrar cuando es que sucedió, pero honestamente ya llevaba bastante tiempo muerto lo nuestro; ya no me sentía igual, deje de sentir la magia de las cosas.
Puede ser el hecho de que las pocas expectativas que tenía de ti no fueron llenadas, o que tú simplemente comenzaste a dar lo nuestro por sentado. Sinceramente, creo que nunca me quisiste de la misma manera en la que yo lo hice.
No te juzgo por ello, lo que puedo reprochar es que si hubieras sido más honesto con lo que querías y sentías, mi vida hubiera sido más llevadera y sencilla; te aseguro que si hubieras sido honesto conmigo por al menos una vez, todo este proceso se hubiera adelantado, y hoy podría estar más recuperado.
Pero no puedo pedirle peras al olmo.
Hoy pienso que para ti era cuestión de tiempo, tampoco eras feliz, pero no eras lo suficientemente infeliz como para dejarnos, te mantuviste en "stand by". Era mucho más sencillo lidiar con el día a día que con los sentimientos que estaban planteados.
Llevaba ya un par de meses diciéndole a mis círculos lo poco feliz que era en nuestra relación, puesto que ya era poco el tiempo que conversábamos o nos veíamos; y cuando sucedía, todo tenía que ver contigo. Si te quiero, tienes la seguridad que mi atención estará centrada contigo; pero porque me amo, sé la atención y lo que merezco.
Fue así como decidí acabar con todo. Lo hablé en las redes, incluso hablé con mi perro respecto al tema; me encontré en la necesidad de explicarle que ya no te volvería a ver. Él te quería mucho y no sabía cómo contener su energía y el cariño que te tenía. Puede que aún lo tenga.
Incluso para mí fue difícil explicarme como ya no te volvería ver; me parecía completamente irónico pensar que la última vez que nos vimos habíamos planeado seguir juntos y la vida simplemente tomo otro camino.
Esa fue la peor parte, hablar conmigo mismo del tema, estaba completamente en shock. Primero fue encontrarme con la realidad que habías decidido soltarnos sin siquiera reflexionarlo, y lo peor es que fue por mensaje de texto. Rogué muchas veces que nos viéramos porque era importante lo que tenía que decir y simplemente lo evadiste. Solo te fuiste.
Lloré mucho esos días y tú solo continuaste con tu vida; no logré explicarme como es que lo hiciste, quizás solo no me querías y ya.
Familia, amigos, y todas las personas con las que hable del tema me dijeron que simplemente lo ignorara y que lo dejara pasar. ¿Cómo es que puedo hacerlo?, mi mundo se cayó y no sabía qué hacer al respecto; y no porque tú fueras mi mundo, pero si porque tenía un plan de vida que había cambiado por vernos suceder. Viví en una mentira, tanto tuya como la propia.
Los días siguientes estaba como inherente, me sentía vacío por dentro y sin las más mínimas intenciones o energía para continuar. Estaba tan inmerso en mi tristeza que en algún punto pensé en renunciar a mi trabajo; bendita sea la necesidad (única vez en esta vida que digo esto).
Mis días fueron duros tal como el invierno que se acercaba. No tenía la intención de levantarme a afrontar otro día, no quería saber nada de absolutamente de nadie.
Todo lo que escuchaba en ese momento es que tú no me merecías, que lo nuestro no estaba destinado a suceder por lo tan diferentes que éramos. Nada nuevo que definitivamente no hubiera escuchado antes.
Yo al menos si tenía la intención (quizás la ilusión) de construir un hogar juntos, yo si creía que nos quedaríamos juntos; mis sentimientos estaban en que quizás y solo quizás nuestras energías vibraban en la misma sintonía.
Mi problema más grande es que tu vida apenas había cambiado con nuestra separación. Fue ahí cuando todo vino en picada.
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Metamorphosis
Short StoryEsta es mi historia más personal hasta el momento, incluso este proyecto ha comenzado como un capítulo de mi libro anterior: "Cartas sin remitente", porque es un escrito netamente dirigido hacia mí. En el camino encontré que quería contar mi histori...