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6:30 p.m.
Ya todos estaban dentro del micro charlando con sus amigos, impacientes por empezar el viaje.
- ¿Qué hace la rubia acá? ¿no dijiste que se iba a Italia?- Le preguntó Bautista a Corcho cuando vio a Luisana sentada unos lugares más adelante.
- No me digas que no se enteraron del quilombo- Martina, una chica que escuchaba la conversación, enseguida se dio vuelta y les contó el chisme.
- Ah... a demás de linda es mala, lo tiene todo.- Suspiró Corcho, maravillado.
- ¡Chofer! ya estamos todos ¿Que pasa que no nos vamos?- Preguntó Felipe, impaciente.
- ¡Falta uno!- Respondió el chófer desde su lugar.
- ¿Quién?- Volvió a preguntar el morocho, cansado de esperar.
- Que raro la acomodada...-Murmuró Luisana, sentada a un lado de Georgina, cuando la última persona subió al micro.
- ¿Que hace esta tarada acá?- Le murmuró Lucía a Camila, y la última se encogió de hombros.
- ¡Ya podemos salir, chófer!- Gritó Olivia, una vez que se había sentado.
El viaje fue tranquilo, al principio todos charlaban, pero luego algunos se fueron quedando dormidos, a tal punto en que solo muy pocos estaban despiertos. Más específicamente cuatro personas;
Luisana, Felipe, Camila y Bautista.Felipe y Bautista estaban sólo un asiento de distancia, por lo que el rubio se había dado vuelta y estaban charlando en voz baja. Por otro lado, Camila y Luisana se encontraban en puntas diferentes del micro, y a demás, ni siquiera se conocían, así que cada una estaba en su mundo.
Llegaron a destino cerca de las 10:30 p.m, bajaron sus bolsos y cenaron, luego repartieron habitaciones y se fueron a dormir.
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Al día siguiente...
En el almuerzoLa mayoría todavía se encontraba almorzando, o en la playa del hotel.
Mauro, el coordinador, les había avisado que la tarde seria libre (o sea, que podían hacer lo que quisieran siempre y cuando sea dentro del hotel) y en la noche habría una fiesta. Obviamente, la mayoría estaban mucho más emocionados por la fiesta, y ya estaban buscando la forma de pasar alcohol sin que los encargados se dieran cuenta.• • • • • • •
Camila y Lucía se encontraban recostadas tomando sol en la playa, mientras los demás se metían al mar o jugaban diferentes juegos.
- ¿Tenes idea de dónde se metió Olivia? No estaba en la habitación cuando despertamos y tampoco bajo a almorzar.- Le preguntó la morocha a su nueva amiga, un poco preocupada por su compañera.
- No te preocupes, a esa es mejor perderla que encontrarla.- Dijo la rubia y las dos rieron.
- No seas m...- Camila iba a contestar, pero una pelota la golpeó en la cabeza
- ¡Perdón! ¿Estás bien?- Felipe se acercó corriendo hasta donde estaban las amigas
- Si, está todo bien.- Respondió ella, tocándose el lugar dónde la había golpeado.
- ¿Segura? ¿No querés que te acompañe a la enfermería?- Volvió a preguntar él, pero ella negó avergonzada. Ahora el chico que le gusta la recordaría por la chica a la que golpeó con una pelota.
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Un atardecer más
FanfictionEl Élite Way School, uno de los colegios más prestigiosos de Buenos Aires, en el que estudian los hijos de las personas más importantes del país. Entre ellos Bautista, Felipe, Camila y Luisana.