Making a Family// Bellarke

Fin.

  En el cumpleaños de Clarke, Bellamy le regaló un hermoso vestido, pero ese no era el regalo de cumpleaños. La rubia tenía a Madi en brazos mientras llamaba a Bellamy desde hacía un rato, ya era el cumpleaños de la pequeña, era primera hora de la mañana, y el chico solamente despertó a ambas para irse.

—Raven, ¿Dónde se fue Bellamy?—preguntó. Su amiga se encogió de hombros y soltó "Dejó algo en la mesa".

Cuando Clarke se acercó, vio un ramo de flores. Se rió.

—Cariño, esto es para ti—aseguró mirando a la niña. Clarke tomó la carta que se encontraba.

"Princesa y princesita,

la verdad es que ayer no le dí mi regalo a mamá, pero porque quería que fuera un regalo de ambas. Por favor, salir al frente y esperarme ahí"

Clarke leyó la carta en voz alta—A veces me da miedo—soltó y supo que su amiga tenía algo que ver cuando salió tras ellas a la puerta, Clarke se sentó en el último escalón mientras Madi estaba a su lado, preguntando una y otra vez por Bellamy. Claramente se emocionó cuando su auto paró y este bajó con una sonrisa.

—¡Amy!—gritó pero Bellamy le hizo señal que lo esperara ahí, pero tenia una gran sonrisa en el rostro. Así fue como sacó una caja grande de la valija del auto. Clarke alzó una ceja mientras este se acercara.

—Bueno, ¿Quién cumplió ayer?

—¡Mamá!—festejó Madi.

—¿Y quien cumple hoy?

—¡Madi!—se señaló.

—¿Abren el regalo juntas?—este dejó la caja y se pudo ver una pequeña puerta.

—¡Casita!—festejó Madi corriendo a abrir, Clarke se quedó a su lado pero miró a Bellamy, aunque un grito emocionado de Madi salió.—¡Perrito!—Para cuando la rubia vio al pequeño golden ser abrazado por la pequeña, sus ojos se cristalizaron.—¡Mamá, perrito!—la niña se cayó hacia atrás, sentándose, mientras el pequeño perro daba languetazos en la niña, saludando, pero no demoró en mover su cola e ir hacia Clarke.—¡Papá, perrito!—gritó Madi por primera vez.

Las chicas miraron a Bellamy, esperando una reacción, quien tomó aire, sonrió y se acercó a esta, agachándose—¿Te gusta, cariño? ¿Viste el perrito?—Madi asintió—. Se quedará en casa con nosotros, y hay que cuidarlo, ¿Si? Y darle mucho cariño.

Clarke rompió en llanto y Bellamy se sentó a su lado para abrazarla, pero a su vez le besó la cabeza fuertemente—. Las tengo, a ambas. Ya las tengo—aseguró con intensión de decirle que de verdad las amaba y que eran su hogar.

El perro fue hacia Raven quien lo tomó y se acercó a Madi—¿Cómo le pondrás?

—¿Mamá?—la niña miró a Clarke quien se limpiaba esas lágrimas con mezcla de emociones.

—¿Cómo le quieres poner?—preguntó emocionada mirando a la niña. —Es muy pequeño—aseguró mirando a Bellamy.

—Quince días tiene. Hay que mantenerlo en la casa por un tiempo hasta que tenga las vacunas. Es ideal para que esté con niños, es cariñoso.

La rubia se apegó a él mientras el cachorro se acercaba a olerlos.—¡Perrito!—Madi volvió a gritar señalándolo, totalmente emocionada—¡Perrito!—todos rieron por la insistencia de la niña.

Clarke tomó al cachorro en sus brazos—¿Entramos con el perrito?

Y así, Raven entró hacia su habitación directo mientras dejaba a los tres en la sala con el pequeño cachorro que se veía sobrestimulado por la niña que gritaba.