Entre Reinos

El reino of fear

Destrucción, ruinas, polvo, eso es todo lo que veía al rededor mío por cada lugar por el que pasaba, pero como llegué aquí eso es otra historia, lo importante es de como saldré.

Meses atrás

Otro día más, más entrenamiento, debemos estar preparados para la llegada de el, el próximo rey de el reino of fear, un nombre que había sido puesto hace ya un siglo al ser el reino mas fuerte, los reinos de cada continente hemos estado en guerra durante todos estos años, pero según las profesias de los astros pronto llegaría la ultima guerra, con la que todos los problemas acabarían.

Vivía sola, mis padres habían fallecido por asuntos de guerra, era complicado despertar algunos días y saber que no estarian conmigo, terminé de alistarme para dirigirme al enteramiento; de camino al entrenamiento me encuentré a mi mejor amigo Zack, aunque en realidad el siempre me esperaba en el mismo lugar, para después decir que era una coincidencia, el y yo siempre hemos sido bastante unidos, el es de piel blanca, un poco mas alto que yo, cabello azabache, ojos de un verde hipnotizante.

-y aquí viene la reina de mis pensamientos-dijo mientras reia y se acercaba para pasar su brazo al rededor de mis hombros

-oh vamos ya te e dicho que así pensaran que estamos juntos lo cual es ralamente extraño somos como hermanos

-si igual no te preocupes Aby no eres mi tipo para nada-dijo mientras se separaba un poco de mi

-no te pongas así, a veces me preguntó cómo podemos seguir siendo amigos, eres un poco insufrible en las mañanas-dije mientras le daba un pequeño golpe con el codo

-Sabes como podemos solucionar todos tus problemas mañaneros- dijo mientras señalaba el cuadrilátero en el que solíamos entrenar combates- siempre es necesario una buena pelea para aligerar la mañana

-acepto pero sabes que soy la mejor en esto

Y así es como nosotros solucionábamos todo, luchando entre nosotros, tuvimos que esperar algo de tiempo en lo que terminaban de entrenar algunas personas.

-¿estas lista?- preguntó con esa mirada desafiante que pone cada que se enfrenta contra alguien

-mejor pregúntame, cuando no lo estoy

Empezó el combate, la gente siempre estaba reunida para ver combates pero los nuestros eran únicos, éramos de los mejores de los estudiantes, dábamos los mejores espectáculos mientras de combate se trataba, todo comenzó tranquilo, hasta que cometí el peor error al combatir distraerme, en ese momento un golpe de Zack me logró derrumbar en la colchoneta

-que te sucede hoy aby, es lo mejor que tienes

Eso fue todo lo que necesite en ese momento para que se detonara esa sensación de destrucción con la que lidiaba hace unas semanas, la controlé lo mas que pude en ese momento mientras devolvía el golpe, se que no fue lo suficientemente fuerte para fracturar algo pero si para lastimarlo, en el momento en el que vi a Zack caer, simplemente me fui corriendo, sentía que esa sensación de querer deshacerme de todo crecía mas en cada momento, me fui directo a un pequeño pero bastante escondido bosque, nadie venia aquí, menos en las mañanas, simplemente me derrumbé el dolor de querer controlarlo era mas insoportable con el paso del tiempo, pero no lo pude evitar por siempre, de un momento a otro algo de la naturaleza que se encontraba alrededor de mi estaba marchita, los grietas que generaba en los arboles eran cada vez mas significativas, sin contar los que ya había logrado desasear por completo.

A un lado mío estaba la pequeña cabaña de mis padres, la cual estaba destruida gracias a mis episodios anteriores, sabia que algo me pasaba pero no podía preguntar a nadie, esto no era normal en este lugar, nadie pasa por esto, todo comenzó unos pocos meses atrás donde poco a poco comencé a destruir pequeñas cosas realmente insignificantes, pero con el paso de los días se volvían mas notorias, e intentado contenerlo desde que lo noté, pero es inevitable cada vez el dolor que causa en mi cuerpo va incrementando, se que es parte de mi, lo puedo sentir fluir por mi cuerpo por cada parte de mi, como algo que me quema esperando ser utilizado.

De camino a mi hogar esperando encontrar algo de tranquilidad, me encontré todo lo contrario, todos los habitantes estaban eufóricos, logré parar a alguien, tanta felicidad no era muy normal

-¿Qué es lo que sucede?- pregunté a una chica, pero cuando se dio la vuelta no era mas ni menos que Tahiya

-Aun no lo sabes, Jake volverá mañana, tal vez deberían todos a empezarme a llamar mi reina a partir de ahora, no lo crees

-Por supuesto, gracias- simplemente la dejé ahí, ella es dos años mayor que yo, no es mala persona como muchos piensan, no es la típica chica que le hace la vida imposible a todos, solo es la chica que fue la ultima pareja del príncipe Jake antes de que se marchara, prometiendo dar una próxima oportunidad a su relación, pero desde ese día Tahiya a alardeado con eso y que será próxima reina y es ahí cuando uno se tiene que alejar si no tomará todo el día para hablar sobre ella y hoy no tenía el humor de hacerlo.

Al llegar a mi hogar todo lo que hice fue comer algo y acostarme, todo lo que supuso está mañana era demasiado, cada vez era más complicado controlar lo que sea que me estuviera sucediendo, me dejaba sin fuerzas para hacer algo más, había tenido suficiente por está mañana