II.

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Un chico rubio lo miraba con ojos abiertos, su boca también estaba abierta. Jisung lo hubiera encontrado tierno si no hubiera derramado cerveza en su ropa.

—¡Lo siento, lo siento! —repitió el chico. —Es que... llevaba dos cervezas; una para mi amigo y para mí, pero alguien me ha empujado y terminé... tirándotela encima.

—Ya, no te preocupes —dijo, aunque en realidad sí debía preocuparse. Tenía todo su torso y pecho mojado, y además no solo era cerveza, sino que hielo también. Si tenía suerte no cogería un resfriado... o quizás podría utilizarlo como excusa para irse a su casa.

—No, no —negó el otro chico todo lo contrario a sus palabras porque se notaba preocupado. —Mi novio siempre tiene camisetas en su auto, iré a buscarla. Espérame en el baño del segundo piso para que puedas cambiarla, ¿sí? Enseguida vengo.

Jisung intentó decirle que no había problema, pero el chico rápidamente desapareció entre la gente y él realmente se sentía sucio con ese olor a cerveza, además de sentirse incómodo por tener su camiseta adherida a su cuerpo.

Terminó obedeciendo al chico y se dirigió a los baños que estaban en la planta de arriba, el cual, afortunadamente estaba bastante más desocupado que el baño del primer piso. Esperó pacientemente a que las únicas dos personas que estaban esperando, ignorando olímpicamente las miradas que iban dirigidas hacia él por estar todo mojado con cerveza.

Entró al baño cerrando la puerta detrás de sí y despojándose de la camiseta, estaba seguro que si Hyunjin lo veía, querría matarlo. Unos golpes en la puerta lo hicieron dar un salto y de nuevo ese cosquilleo en la parte trasera de su cabeza se hizo presente. Abrió la puerta, solo asomando su cabeza para que nadie viera su torso desnudo y de repente se quedó quieto porque lo único que él podía ver eran unos grandes ojos mirándolo sorprendido. El chico alzó su mano mostrando la camiseta que llevaba consigo, pero seguía tan mudo como Jisung.

El afectado la tomó entre sus manos y rápidamente cerró la puerta. Era extraño, jamás lo había visto en su vida, pero... era como si lo conociera desde toda su vida.

Se puso la camiseta con rapidez y luego fue al lavado para mirarse frente al espejo. Sus brillantes ojos lo observaban a través del vidrio con miedo, pero al mismo tiempo con una esperanza única. Quiso golpearse así mismo.

Tomando la camiseta de la que antes se había despojado, salió del baño, llevándose la gran sorpresa de que el chico que le había pasado la prenda seguía afuera.

—Mi amigo dice que lo siente, él no quería derramarte su cerveza encima —habló, apartándose de la pared donde estaba apoyado y sin invitación comenzó a caminar detrás de Jisung.

—Tu amigo ya se disculpó, no tienes porqué disculparte por él, además fue un error —musitó, bajando las escaleras y siendo seguido. La música volvió a retumbar fuertemente en sus tímpanos y no supo si la otra persona le había respondido. Quiso buscar a Hyunjin entre toda la gente, pero fue inútil.

Sin percatarse si el desconocido lo seguía, se dirigió hacia la barra nuevamente donde se sentó y pidió una cerveza más. Una vez la tuvo en sus manos, se giró en el mesón para mirar nuevamente a las personas que bailaban, pero pudo darse cuenta que el chico seguía a su lado.

—Uhm... —lo miró buscando una respuesta del porqué seguía justo a su costado, sin embargo, decidió no ser descortés. —Hola...

Las destellantes luces que Bangchan había puesto hacían ver la cara del desconocido algo borrosa, pero según lo que había visto cuando le pasó la camiseta, el chico era bastante guapo.

—Hola... —sonrió, apoyándose en la barra de la misma manera en la que estaba Jisung, pero sin dejar de mirarlo. Sus brazos estaban a escasos centímetros de tocarse y la conocida sensación del cosquilleo apareció en sus sistemas.

Soul(not)mate ↬ Minsung (SKZ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora