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Narra ____:

Todo empezó a mis 10 años, cuánto me secuestraron, estaba de paseo en el bosque con mis padres, mis tíos, mi primo y abuelo. Ellos siempre cuidaban mucho de mamá, mi tía y yo; por una extraña razón nos sentimos observadas y en un segundo ya no estaba con mi familia.

No me dió tiempo de gritar o algo, cuando ví que estaba serca del lago; el cual estaba muy pero muy lejos de donde estaba con mi familia.

Mi atacante me soltó dejándome caer al suelo bruscamente, me di vuelta para ver el posible último rostro en mi vida. El hombre tenía piel pálida, cabello largo y rubio, pero de todo resaltaban sus ojos, los cuales eran de un color rojo sangre.

Recordé en ese instante todas las historias de mi abuelo, las que solo consideraba leyendas y cuentos de terror.

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--Pero que linda, la magia corre por tus venas y tiene un dulce aroma--

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Sujeto mi rostro y sus manos era frías como el hielo y sus ojos rojos sangre, su mirada derritiera a cualquiera pero yo sabía muy bien lo que era por las historias, un vampiro.

En ese momento desee que mi familia me salvará o cualquiera; pero todas esas ideas desaparecieron cuando el vampiro me mordió el cuello y sentía como poco a poco mis fuerzas se desvanecían.

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Estaba a punto de soltar mi último suspiro cuando de la espesura del bosque salieron 3 lobos tan grandes como osos, que al verme corrieron en mi dirección, pero a atacar al vampiro. Pude ver cómo lo desgarraban cuando lo atraparon unos metros adelante.

Todo empezó a verse borroso y ya no me podía mantener en pie, caí al suelo y ví salir a otro lobo, un poco más pequeño que los anteriores y sobre el dos personas estaban sentadas.

No pude distinguir nada más ya que todo se volvió negro y frío, lo último que pude distinguir fue la luna llena que apenas se elevaba en el cielo nocturno.

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Retome la consciencia... Lo primero de que me di cuenta fue que atraves de mi ventana los rayos del sol entraban, me talle los ojos y divisé que estaba en mi habitación.

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Pasaron casi dos semanas y todo estaba normal o eso pensaba yo... Estaba en la escuela; la clase no me parecía aburrida, pero cuando fue mi turno de pasar a la pizarra la profesora se asusto mucho.

Estaba hirviendo como si tuviera fiebre, pero yo me sentía normal; la profesora insistió en llamar a mis padres, los cuales al tocarme me sacaron de la escuela.

Yo estaba perfecta, pero mi padre sobre todos insistió en que tenía que ir a casa. Me parecía una locura, al llegar a casa todo fue peor, toda la familia estaba en el patio y me pidieron que me sentará.

Todos soltaron un suspiro cansado y me empezaron a decir cosas horribles, que estaban decepcionados, que siempre quisieron tener un niño en ves de a mi. Pero de todas las palabras la que más me dolieron fueron las que dijo mi abuelo.

Dijo que siempre me trató bien por qué le di lástima, porque lo que él quería era otro nieto, un barón, que era inútil para la familia... No podía seguir escuchando más así que salí corriendo al bosque.

Ya era de noche pero no me importaba, lo único que quería era alejarme más y más de esas personas que decían ser mi familia... Después de no se cuánto estar corriendo en el bosque me detuve por una ola de calor insoportable, me quite mi chaqueta en busca de sentirme fresca, pero seguía igual. Termine en ropa interior y todavía me sentía igual; cerré los ojos y un segundo después me sentía bien.

Bosque Y Océano ||•Seth Clearwater•|| (Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora