Haruka Mitsuki |Naruto|

Un nuevo comienzo |Cap. 12|

En multimedia: Deidara <3 uwu (Imaginenlo más grande)

Aquel día estaba nublado, perfecto para quedarse en casa a comer Ramen, pero Naruto seguía ahí, acompañándome.

Después de que cayera al suelo desmayada, los Ninjas contratados por Gatou, atacaron al equipo, sin embargo, al ultimo momento desistieron por pelear, huyendo para no volver jamas. Justo antes de volver a Konoha, se hizo un entierro a Haku y Zabuza, en donde solo participo los miembros del equipo siete, arrepintiéndome de haberme desmayado, pues quería dar un ultimo adiós a aquellas dos personas. Fue entonces cuando llegamos a Konoha, donde me trataron inmediatamente, ya que la herida de mis manos había sido profunda y se había infectado, sin contar las múltiples lesiones que se extendían por todo mi cuerpo. Después de un rato de divagar el estado de mi cuerpo, llegue a la conclusión de que podía haber hecho un mejor trabajo, donde mis heridas hubieran sido superficiales, por ello necesitare mejor entrenamiento.

-Naruto- Le llame, el levanto la vista y se encontró con la mía, se notaba exhausto.

-¿Si, Haruka-Chan?- Pregunto un poco adormido, pues pocas veces lo veía así, sin energía.

- Si quieres puedes ir a casa, Naruto. Necesitas dormir y comer algo- Le aconseje, el me miro serio.

-Pero..-Trato de evadir a lo que le decía, pero le interrumpí.

-No, esta bien, de todos modos Sasuke y Sakura vendrán en media hora- Dije viendo el reloj colgado en la muralla. Naruto rechisto para después irse, no sin antes darme un beso en la frente, que a pesar de ser amistoso, me sonroje enormemente. Ya estaba un poco aburrida, pues hace minutos que no encontraba que hacer, miraba como avanzaba el reloj y poco a poco me fue durmiendo, sin embargo, mi tranquilidad fue interrumpida por el toque a la puerta.

-Pase- Murmure un poco enojada, por la puerta se asomo Sasuke sin la presencia de nadie mas.

-Hola- Murmuro tan serio como siempre, dejo una flores azules en el jarrón al lado de mi cama, y después se sentó en un banquillo colocado al lado de este.- ¿Como has estado?- Siguió, tratando de entablar una conversación, pues no es que habláramos mucho, así que la conversación fue la típica de un desconocido a otro, por lo que en menos de cinco minutos ya estaba aburrida, así que en vez de decir algo coherente, conteste pavadas.

-¿Queso?- Pregunto Sasuke de repente, haciendo que prestase atención a sus preguntas.

-¿Eh?-Pregunte desconcertada, pues no entendía nada de nada.

-Te he preguntado sobre que vas a hacer después de recuperarte- Dijo con una expresión seria, pues no me lo había planteado, así que me demore un poco en contestar.

-Supongo que mis manos estarán bien- Dije rápidamente, no respondiendo la pregunta de Sasuke, pero empece a desatar las vendas de mis manos, hasta que me tope con mis heridas- ¡Mierda!- Murmure viéndolas, pero nada, se habían sanado completamente, pero si dolían un poco.- ¡Genial, ahora podre irme!- Grite feliz, Sasuke me miro extrañado.

-Pero si tu recién...- Dijo antes de que saliera por la ventana, saliendo al jardín del hospital.

-Adiós, Sasuke-Kun - Dije agitando mi mano, despidiéndome de Sasuke, quien todavía tenia cara de desconcertado. Camine por el patio, hasta que encontré la salida: Una muralla de dos metros, que era dos veces mi estatura normal. Escale por la muralla, saltando al otro lado y cayendo de trasero al piso. Después de un pequeño descanso, seguí caminando, hasta encontrar el centro de Konoha, donde me di cuenta que la bata de hospital, solo cubría la parte delantera de mi cuerpo, por lo que tuve que pasar a escondidas. Llegue finalmente a mi casa, donde extrañamente mi ventana estaba abierta, por lo que pude entrar, pero sentí un extraño olor... Como si estuvieran preparando Ramen, asustada me acerque a la cocina, pero no había nadie, solo un tazón con sopa preparada en la mesa...