Capitulo 0 / parte 3

446 16 4
                                    

Heriberto respiraba entrecortada mente y un poco de sudor caí por su frente hasta su mejilla, estaba algo agitado y buscaba mi mirada. Entre abrió los labios y trago saliva.

- Nos tienen rodeados - dijo sin apartar su mirada llena de miedo de mi cara - Tenemos que irnos ...

Mi mundo se detuvo por unos segundos. ¡Joder!, pase mis manos por mi rostro y respire profundo, gire a ver a mi pequeña que dormía profundamente y tome fuerzas. La sangre me subía y me bajaba ardiendo por todo mi cuerpo. Tenia que sacar a mi familia de aqui como diera lugar. Le ordene a Heriberto que tomara a Mila entre sus brazos y saliera detrás de nosotros para cubrirlos. Los primeros disparos se hicieron sonar rápidamente, el ambiente se pone pesado y contrarreloj, trato de moverme rápidamente por la casa con una pistola en mano. Al llegar a la sala veo que Chacota me espera para cubrirnos y salir todos de ahí, por lo cual le hago una seña para atravesar la habitación. En ese instante se escucha el estruendo de una bala atravesando el vidrio de la puerta de cristal, haciendo que todos nos tiremos al piso. Rápidamente giro a ver a mis hijos para ver si están bien y los deviso un poco mas atrás de nosotros. Heriberto abrazaba a Mila que ya se encontraba despierta, la mirada tan tierna de mi princesa se cruza con la mía y un nudo se forma nuevamente en la garganta. ¿Como podía arriesgarla a esto?, ¿como podía darle este tipo de vida?... ¿como?
Minutos después nos encontrábamos corriendo por uno de los pasillos de la hacienda llegando a una puerta que daba a un túnel secreto. Este daba hacia las afueras de la hacienda, a unos pocos metros de la pista.

Salimos de la hacienda, los disparos se escuchaban un poco mas lejos. Corríamos hacia la pista, cuando me percato que a unos metros detrás de unos arboles se encontraban los Robles  listos para dispararnos. Solté la mano de Ximena y me quede parado en medio del camino. Si a alguien iban a matar tendría que ser yo. Le tomo unos segundos a Ximena darse cuenta de que yo ya no iba corriendo detrás de ella y había soltado de su mano. Estaba listo para que dispararan.

- ¡PAPAAAAAAAAAA! - grito Mila corriendo hacia mi. Se había soltado del agarre de Heriberto. Cada vez estaba mas cerca de mi. ¡No disparen! Maldita sea ¡No disparen! 
- ¡Milaaaaaaaaaaaa! - grito Heriberto corriendo detrás de ella junto con Ximena que en cuestión de segundos estaba desesperada y apunto de romper en llanto.
- ¡NO DISPARES HAY UNA NIÑA! - grito Monica Robles, pero fue demasiado tarde, su hermano segundos antes había disparado. - ¡ERES UN ESTUPIDO!
La bala llego segundo después, tome a mi hija entre brazos tratando de protegerla, pero fue demasiado tarde. Ambos caímos ante el impacto de la bala, rápidamente busque la mirada y el rostro de mi hija. Sus ojos estaban cerrados y una mancha de sangre salía de su ropa. No podía creerlo, mis ojos se cristalizaron y rompí en llanto.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 02, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Fuiste miaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora