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03.12.2021

[...]

— En realidad, estaría bien que sintieras celos de Yu Ri— dijo Ye Na, con una mano en su mentón y una mueca en sus labios.

Los gricaceos ojos de la gatita negra la miraron.

— Considerando que tú das mala suerte y Joyul da buena suerte... Son como polos opuestos— dijo la tigresa—. No sé por qué no lo había pensado antes.

La gatita negra maulló, rodando sobre su lomo para que sus patitas tocaran al suelo, antes de cambiar a su forma humana.

— ¿Los conejos dan buena suerte?

— Sus patas dan buena suerte— dijo la tigresa—. Y Yu Ri tiene cuatro así que tiene mucha buena suerte.

Min Ju frunció el ceño, un pequeño mohín se instaló en sus labios.

— ¿Una mentirosa da buena suerte y yo no?

— La mentira no se relaciona con la suerte, pequeña tigresa.

Min Ju seguía molesta, su linda humana se había ido con la suertuda de Yu Ri.

Aunque en realidad estaba triste porque no recibía atención, con las orejas caídas, comenzó a acariciar su peluda cola sólo para hacer algo, ya que Ye Na se había entretenido con la pelota de nuevo.

Sin querer, un maullido lastimero salió por sus labios.

Ye Na la miró con ojos preocupados, ella cubrió su boca como si así pudiera retener cualquier otro sonido triste que quisiera escapar.

— Creo que ya entraste en la segunda fase de los celos, tristeza— dijo la tigresa, aunque no ayudo ni un poco a la gatita.

Min Ju bajó la cabeza, ocultando unas lágrimas que brillaban en sus ojos.

— Oh, Min Min — Ye Na abrió sus brazos, ofreciendo un abrazo que la gatita rechazó.

Antes de que pudiera decir otra cosa, la puerta del cuarto se abrió, entrando Chae Won rápidamente.

— ¡Min Ju! Estabas aquí, ¿Por qué te escondías? Te estaba buscando.

Chae Won se había acercado a las dos felinas, pero al ver la postura de su minina, se preocupó un poco, arrodillándose a su lado para acariciar su cabeza y orejitas.

— Gatita, ¿Qué tienes? — murmuró, inclinó a Min Ju hacia ella, envolviendola con sus brazos, dejó besos sobre su cabeza en un intento por calmarla— Min~, ¿Qué le pasa a mi gatita llorona?

Chae Won continuó haciéndole mimos y dándole besitos, Min Ju se había acomodado casi encima de ella, con el rostro escondido en su pecho, hasta que había empezado a ronronear.

— Linda gatita, ya es tarde, ¿Vamos a casa?

Min Ju simplemente asintió, cambio a su forma animal sólo para que Chae Won pudiera cargarla, saliendo de la casa de Hye Won sintiéndose cálida entre los brazos de su humana.

❝ 𝐁𝐀𝐃 𝐋𝐔𝐂𝐊 ❞ | 2KIMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora