Victoria Stark, hija del Avenger de renombre mundial, Tony Stark.
Victoria Maria "Vic" Stark es una niña prodigio, miembro de los Vengadores y una inhumana después de que un secuestro salió mal. Una estudiante de medicina excéntrica pero inteligent...
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—Las noticias os aman, muchachos. Nadie más lo hace. No ha habido un llamado oficial para el arresto de Banner, pero está en el aire —dice Hill.
—¿Fundación Stark Relief? —pregunta Tony.
—Ya estoy en la escena. ¿Cómo está el equipo? —pregunta Hill.
—Todo el mundo... recibimos un golpe —responde Tony, mientras sus ojos se desvían hacia su hija, que está muy pálida.
—Bueno, por ahora me quedaría en modo sigiloso y me mantendría alejado de aquí —dice Hill.
—Entonces, ¿correr y esconderse? —pregunta Tony.
—Hasta que encontremos a Ultron, no tengo mucho más que ofrecer —responde Hill.
—Nosotros tampoco —dice Tony.
Tony apaga el monitor que muestra a Maria Hill terminando la llamada. Luego, se dirige a Barton, que está pilotando el Quinjet.
—Oye, ¿quieres cambiar? —pregunta Tony.
—No, estoy bien. Si quieres comer algo, ahora es un buen momento, porque todavía faltan algunas horas —dice Clint.
—¿A unas horas de dónde? —pregunta Tony.
—Una casa segura —responde Clint.
Tony asiente y se mueve hacia su hija, acariciándole la cabeza. Victoria apoya la cabeza en su hombro, cierra los ojos y le palpita la cabeza.
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El Quinjet aterriza fuera de una gran casa de campo y todos caminan hacia la casa.
—¿Qué es este lugar? —pregunta Thor.
—¿Una casa segura? —pregunta Tony.
—Esperemos —dice Clint.
Todos entran en la casa.
—Cariño, estoy en casa —dice Clint.
Laura, la esposa de Barton, muy embarazada, entra desde la cocina.
—Hola. Traigo compañía, siento no haber llamado antes —dice Clint.
—Hola —responde Laura.
Laura besa a Barton. Luego, Tony comenta, refiriéndose a Thor:
—Este es un agente de algún tipo.
Victoria sonríe y se echa hacia atrás el pelo sudoroso mientras Clint presenta a su esposa al equipo.
—Caballeros y Victoria, esta es Laura —dice Clint.
—Conozco vuestros nombres —dice Laura. Todos la miran con torpeza.
—Oh, ya vienen —dice Clint.
Cooper, el hijo de Barton, y su hija Lila, entran corriendo.
—¡Papá! —grita Lila.
Barton recoge a su hija.
—¡Lila! —dice Clint, besando la parte superior de la cabeza de su hijo—. ¡Oye, amigo! ¿Cómo estáis, chicos?
Clint se dirige a los demás, que observan sorprendidos.
—Estos son... agentes más pequeños —dice Tony.
—¿Trajiste a la tía Nat? —pregunta Lila.
—¿Por qué no la abrazas y lo averiguas? —responde Natasha.
Lila corre hacia Natasha, quien la toma en brazos. Victoria sonríe ante la linda escena.
—¿Quién diría que eras tan buena con los niños? —pregunta Victoria.
Natasha se vuelve y le sonríe.
—Perdón por irrumpir en tu casa —dice Steve.
—Sí, habríamos llamado con anticipación, pero estábamos ocupados sin tener idea de que existíais —dice Tony.
—Sí, bueno, Fury me ayudó a configurar esto cuando me uní. No lo dejó en los archivos de SHIELD y me gustaría mantenerlo así. Me imagino que es un buen lugar para esconderme —dice Clint.
—Cariño, te extrañé —dice Laura, tocando el estómago de Clint.
—¿Cómo está la pequeña Natasha, eh? —pregunta Natasha.
—Ella es... Nathaniel —dice Laura.
Natasha se inclina hacia el estómago embarazado de Laura.
—Traidor —dice Natasha.
Victoria se muerde el labio, divertida.
Las alucinaciones provocadas por Wanda continúan arrastrándose en la mente de Thor, quien sale de la casa.
—Thor —dice Steve.
—Vi algo en ese sueño. Necesito respuestas, no las encontraré aquí —dice Thor.
Thor usa su martillo para salir volando de allí.
Victoria nota el rostro tenso de Steve y suspira, mientras su propia mente se pregunta por su visión, esperando que nada de lo que vio suceda.
