intoxicado

19.Odiame, ámame

Light cerró la puerta de golpe cuando entraron en su habitación compartida. L se volvió hacia él y arqueó una ceja: "Sé que no estás contento con mi método, pero esa es la única forma en que podemos hacer algún progreso y lo sabes ..."

"¡No, debe haber otra forma menos arriesgada!"

"Light-kun, todos estábamos conscientes desde el principio de que esta investigación es un riesgo en sí mismo. Ser detective es un riesgo en sí mismo también ... así que, no entiendo por qué estás tan preocupado por eso ahora. "

"Ryuzaki, tenemos todo el mes. Creo que es mucho tiempo para pensar en un plan menos arriesgado".

"Light-kun, ¿cómo no puedes entender que este es el plan perfecto?" L no cedió. Por supuesto. Como siempre.

Light negó con la cabeza y L se acercó a él. Sintió esa oleada de emociones aún más fuerte en Light. Había muchas capas de aromas en Light, pero lo que salió a la superficie fue una profunda ansiedad y pavor mezclados con miedo.

Light habló de nuevo, "¿Plan perfecto? ¿Llamas a esto un plan perfecto?"

"Sabes que no hay otra manera ..."

Light apretó los puños. "Sí, por supuesto ... ¡y además, persuadiste suciamente a Misa para que cooperara con nosotros en el caso!"

"Hmm ... honestamente no sabía que ibas a empezar a cultivar emociones tan fuertes hacia ella tan rápido." 

Light apretó los puños de nuevo y pensó brevemente, 'Todo es por ti, idiota', y se volvió abruptamente hacia el hombre de cabello oscuro. "¡Y encima de eso, empezaste a coquetear con ella!"

"Pensé que Light-kun está aprobando tales métodos." L se llevó el dedo a los labios y le dio a Light una mirada inocente. Sabía que podría haber presionado demasiado, pero como había llegado tan lejos y tenía a Light donde quería, no se rindió.

"¡Maldito!"

L agarró a Light por el antebrazo. Presionó un poco más fuerte y torció el brazo de Light tirando de él. Éste jadeó de sorpresa y gimió de dolor.

"Esto duele, Ryuzaki-"

L cedió su agarre pero ambos continuaron mirándose el uno al otro. Light quería atacar deliberadamente al detective con desagradables aromas de rabia para enmascarar sus emociones más profundas, pero notó que no sería fácil. Estar tan cerca de otro omega y controlar sus emociones se volvió cada vez más difícil y L continuó sosteniendo su mano sin soltarlo.

"Déjame ir." Light dijo siseando.

"No." L dio su breve respuesta, su rostro pálido como siempre. Cabreó aún más a Light.

Light escupió en respuesta: "¡Por eso te odio!"

"Ódiame tanto como quieras". Dijo L apenas audible, y no cedió, pero sus ojos se suavizaron un poco y cambió de tema. "Estás bastante molesto."

"¿¡Y eso qué te importa a ti!?"

"Importa..."

"Sí, claro ..." Light entonces trató de soltarse del agarre de L, "... dije que me dejaras ir".

"Y yo dije, estás molesto".

"¿¡Y QUÉ!?"

L comenzó a emitir un aroma relajante para calmar un poco al joven alfa.

"No pruebes esto conmigo ..." Light pronto comenzó a sentirlo, y L comenzó a frotar sus muñecas en su cuello. "¡Detén esto! ¡Estoy bien! Estoy tranquilo ahora".