"¡Qué diablos Damon!" Grité mientras me despertaba, dándome cuenta de lo que acabamos de hacer. Se sienta de inmediato, pero se protege los ojos de la luz del sol.
Aprieto los dientes, bajando su mano de su rostro con enfado. ¡Se suponía que nada de esto iba a pasar!
Acabo de arruinar su relación y potencialmente nuestra amistad. Damon solo se ve confundido, pero todo encaja cuando deja escapar un 'oh'.
"¿¡Eso es todo lo que tienes que decir!?" Le susurré al vampiro sonriente, que abrió la boca para hablar.
"¡No! No quiero escucharlo. No te voy a culpar porque es mi culpa que esto haya pasado." Divagué mientras él niega con la cabeza, recostándose en el colchón.
"Ele, estás pensando demasiado en esto." Se quejó mientras respiraba hondo solo para encontrarse con la mirada asesina que le estaba dando. Me senté a horcajadas sobre su cintura mientras agarraba su rostro mostrándole lo serio que era.
"Ese es tu problema, no estás pensando lo suficiente". Espeté, soltando su rostro con fuerza. Quizás estoy exagerando todo esto, pero no puedo evitarlo.
"Te ves caliente cuando estás enfadada". Se muerde los labios inclinándose hacia mí mientras yo rápidamente pongo mi mano en su cuello, llevándolo hacia abajo.
A los ojos de cualquiera, pensarían que esta sería una posición muy íntima si no fuera por la mirada hostil que retraté en ese momento.
"¿Estás seguro de que quieres ir allí?" Pregunté en voz baja mientras me inclinaba para susurrarle al oído.
Tragó saliva audiblemente mientras mis ojos parecían oscurecerse. Sabía que no le haría daño, pero esta interacción no parecía amistosa.
"No, señora." Bromeó mientras mis ojos volvían a su celeste original. Sonreí levemente ante su intento de aligerar la atmósfera.
"Bien, prepárate. Tengo algo que podría arreglar esto". Me levanto ahora, plenamente consciente de que todavía estoy desnuda. Gemí, transportándome a mi habitación, me di una ducha y me vestí.
A lo que me refería cuando dije que arreglaría esto es a un hechizo. Es un hechizo que involucra magia oscura, pero ayudará con nuestro problema. Es bastante simple, así que no sé si funcionará.
Nadie ha tenido que usarlo antes, o tal vez es solo que nadie lo recuerda. Pero yo recuerdo el hechizo. Bajo las escaleras solo para encontrarme con una Bonnie de aspecto tranquilo. No he visto a Bonnie mucho, tal vez aquí y allá, pero no siempre.
"Hola, Bonnie." Digo educadamente mientras mira hacia arriba rápidamente con un brillo desconocido en sus ojos antes de negar con la cabeza.
"Hola, Ly- Eleanora, lo siento." Me detuve confundida mientras fruncía el ceño, pareciendo estar muerta en sus pensamientos.
"Lyssa, eso es nuevo."
"Seguro que lo es."
Simplemente me encogí de hombros, no quería confundirla más de lo que ya estaba. Me apresuré y conseguí algo de beber mientras los recuerdos de la noche anterior se reproducían en mi cabeza.
"Lo que hiciste fue sensato. Tenemos que concentrarnos en salir de aquí, no en un vampiro que tiene una novia malcriada."
Tragué saliva ante la nueva voz en mi cabeza, que había notado antes, pero no hasta ahora. Sabía que estos no eran mis pensamientos en absoluto.
"Solo... Deja que Damon esté aquí en segundos."
Inmediatamente después de que la voz dejó de hablar, Damon bajó. Fue directamente al bourbon. Resoplé, sabiendo que lo necesito más que a él. Me acerco justo antes de que él ponga su boca en él, solo para que lo detenga.
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Antes del anochecer
FanfictionEleanora no deseaba nada más que dejar el mundo de la prisión y regresar a casa. A ella no le importaba menos cómo eran, siempre está notando lo bueno en las personas. No importa cuánto los odiaran todos, ella simplemente no podía. No podía verlos p...