Capitulo 3

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Unos años después de aquel encuentro en la fiesta de la RFA, Jumin organizó una gran fiesta para su pequeña hija quien ya cumplía 10 años. MC con ayuda de los demás miembros de la RFA lograron convencer a Jumin de invitar esta vez a Zen, años antes ninguno de los dos se invitaba mutuamente.

Llegado aquel emocionante día para la pequeña, todo ya estaba listo, la fiesta iba a organizarse en un gran salón, de una manera muy elegante, porque claro, Mi Joo merece eso y mucho más decía Jumin.

La hora de la fiesta llegó, los invitados estaban llegando y aún no había ninguna señal de los albinos, Jumin estaba en cierta parte contento de no lidiar con ellos para cuando su sorpresa MC le dijo que ya habían llegado.

Ciertamente tanto Zen como su esposa se encontraban incómodos ante la situación y sobre su vestimenta, no estaban tan elegantes como en la situación que estaban.

Zen observo la incomodidad de su esposa e intentaba tranquilizarla

-Te ves fantástica este día- dijo Zen

Su esposa le dio una sonrisa y pasaron a saludar a Jumin, MC y a saludar a la cumpleañera.

-Muchas gracias por invitarnos- dijo la esposa de Zen

-El gusto es nuestro de volvernos a ver- dijo MC, llamando a Mi Joo para que se acercará

-Wow, ¡eres tu!- dijo el pequeño albino

Jumin en cierta parte estaba algo molesto

-Toma, esto es para ti- dijo el pequeño mientras entregaba el regalo a la pequeña niña

-Muchas gracias - dijo Mi Joo

-Mi Joo, ¿por qué no vas a jugar con Jin-Sun y los demás? - Dijo MC

Mi Joo le dijo a Jin Sun que lo siguiera

-MC... - dijo Jumin

-Me alegra volver a verlo, espero que se la pasen bien, voy a checar algunas cosas con Jumin- dijo MC antes de despedirse

Jumin llevó a MC en un lado más lejos de los invitados

- Jumin cálmate, Jin-Sun no hace nada, así que por favor disfrutemos la fiesta-dijo su esposa antes de ir a saludar a los demás

Por parte de ambos pequeños, estaban sentados en una mesa para niños, tomando un jugo porque estaban algo cansados

-Pensaba que no te volvería a ver o te imagine-dijo Jin-Sun

-¿porque? - preguntaba la pelinegra

-Porque pasó un tiempo, pensé que te imagine, como un ángel-dijo el pequeño albino

-¿un ángel? -  dijo la pequeña

-Eres muy linda-

Aquellas palabras hicieron sonrojar a la pequeña niña...

Después de eso siguieron jugando hasta que Mi Joo se cayó, parecía que iba a llorar hasta que Jin Sun la levantó y le dijo que estaba bien, que no debía de llorar.

La fiesta transcurrió muy bien, ese había sido el mejor día para Mi Joo y al llegar a casa estaba emocionada por abrir regalos, sus padres le preguntaban sobre cual regalo quería abrir, ella quería abrir el regalo que le dio Jin-Sun, Jumin un poco irritado se lo dio, ella muy emocionada lo abrió y vio que era un lindo collar con un dije que tenía un corazón. Jumin no fue capaz de arrebatarselo por ver la cara emocionada de su hija...

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