Calipso tenía un mejor amigo digo "tenía" porque, tras su muerte decide totalmente terminar el Instituto e irse a Argentina para estudiar e la universidad, cuando se va ella no habla más con su familia, excepto con su abuelo. Después de dos duros añ...
- Me llegó la propuesta de poder ir a estudiar a Nueva York por 5 meses – lo hablo de golpe.
Charlie me mira de mira de golpe sin entender nada.
- ¿Por qué me lo cuentas a mí? – dice desinteresado.
Auch, eso dolió.
Tenso mi hombros – Porque eres mi amigo y se supone que tienes que felicitar o algo así – digo obvia.
Suelta una risita sarcástica y niega lentamente con la cabeza.
- Por opinión no te importo hace 4 años, ¿Por qué me importaría ahora Calipso? Hace lo que quieras a mi ya no me importa –
Lo miró dolida, una bala dolía menos.
Supongo que lo merezco, me fui de su vida sin aviso previo, pero él no me entiende a mí. Estar acá me hacía mal y mi huida a la Argentina la veía como mi salida del sufrimiento. Pero, aunque sea haberlo dicho no hubiera sido tan malo ¿No?
- Yo...
- No pongas excusas Calipso – se para enojado. Hago lo mismo.
Respiro hondo.
- Tienes razón, eras mi amigo, tenias derecho a saberlo, siempre estuviste para mí y yo... te oculte algo muy importante. Lo siento vale, solo quería irme de acá, no la pasaba del todo bien – me sincero.
Se sienta devuelta en el piso y hago lo mismo.
- Yo fui quien fue la primera persona es buscarte durante meses, pensé que te habían secuestrado o incluso matado. No dormía pensando en vos, en donde estarías, con quien estarás y como estarías. Después de 4 meses Bastián me confeso que te vio yéndote de la casa y que estabas viva. Me puse feliz y triste, porque me dijo que nadie se enterara dónde estabas y que solo hablabas con tu papa y nadie más. Ese día me juré a mí mismo jamás mas buscarte, porque si realmente me querías hubieras buscado la forma de hablar conmigo –
Al otro día
Estamos en la sala de la mansión de mis padres, mi mamá está en el hospital, mi papá ya despertó y hoy le dan el alta. Estoy muy feliz por ello.
Estamos Seth, Charlie, Bastián y yo
- Mañana a las 9:00 de la noche va a ve un fiesta, donde van a ir todos los mafiosos de Europa, también los alemanes – los chicos asienten con la cabeza, pero yo lo niego.
- A mi no me esperen – me apresuro a decir.
- Sos unas de las jefas de las más grandes mafias del mundo y de Europa, claro que tienes que ir. Tenes que estar presente –
- Pues que les den por culo – me levanto del sillón.
Horas después
- Miguel, ¿Puedes llevarnos al shopping más cercano por favor? - este asiente y pone le marcha el auto.
Estoy con Lucía, la novia de mi hermano, yendo a comprar el estúpido vestido para mañana.
Lucia es muy bonita y tímida, perfecta para mi hermano. Es como una amiga para mi y mi cuñada por supuesto. Lo raro es que nunca tuve una amiga, siempre estuve rodeada de hombres, pero estar con ella me hace bien.
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Es el quinto local al que entramos o algo así, ya perdí a cuenta.
- No me gusta - hago una mueca de desagrado.
- Y a mi menos – decimos mirando un vestido color moco, es espantoso. – Vayamos a otra tienda –
- También 'podemos ir con un jean, remera y zapatillas – trato de que cambie de opinión, 'pero no funciona porque pone una cara de espanto.
- Ni lo sueñes, hay que ir vestida como unas bellas damas, y no común y corriente – bufo y salimos del local.
Seguimos mirando, Lucía ya se compró un vestido junto con unos tacos negros al igual que es el vestido y algunos accesorios para complementar la vestimenta.
- ¡ESE ES EL VESTIDO! – grita de repente Lucía haciendo que salte de la nada. La miro y señala la vidriera que está al lado mío. Hay un vestido de color rojo con caída tipo vestido de princesa, con escote abierto en V, la cintura es ajustada al cuerpo y tiene una abertura en la parte de la pierna derecha haciendo que se vea la pierna.
- Ese es tu vestido vamos a probártelo – habla emocionada, agarra mi mano y me arrastra hasta el local.
Me lo pruebo y salgo de vestidor, me miro al espejo que está fuera y realmente estoy hermosa, me queda muy cómodo y es elegante, es perfecto.
- Mira, encontré estos zapa.... – me doy vuelta y veo a Lucía con unos zapatos en la mano, pero de pronto se calla mirándome con la boca y los ojos abiertos.
- ¡Te queda precioso Cali, ese definitivamente es tu vestido! – dice mientras aplaude con mucha felicidad.
- Gracias Lu, me encanta como me queda – digo sonrojada.
- Toma – me entrega una caja de zapatos – Son unos tacos que te irán genial con el vestido que llevas –
Me siento en unos de bancos del local, abro la caja y son unos zapatos terciopelos de color dorado. Me los abrocho, me paro, me miro al espejo y los veo bastante bien. Camino un poco y los manejo perfectos.
- Ya estamos – habla Lucía atrás mío, me doy vuelta y esta hablando con la vendedora. – Los llevamos –
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Listo por hoy, espero que les guste este nuevo capítulo, besos.
Aca esta foto de zapatos que utiliza Cali.
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