Best of me [Shinichiro Sano x Oc] [Terminada]

Leopardo blanco

2000

Los gemelos leopardo blanco eran el orgullo de los Black Dragons, no habia nadie mas fuerte que ellos en esa o el resto de las pandillas, y uno de ellos en especial, era la absoluta adoracion de Shinichiro Sano, su lider.

Nozomi era la chica mas dulce del mundo cuando no estaba luchando entre pandillas junto a su hermano con golpes en el rostro y el cuerpo, y Shinichiro habia caido como un tonto a sus pies, estupidamente enamorado apenas la vio pelear por primera vez. Wakasa pensaba que Nozomi y Shinichiro eran muy parecidos, tenian el mismo corazon humilde y amable que siempre buscaba ayudar a los demas.

No era de sorpresa para el que fuera la mejor, considerando que habia sido enseñada por Wakasa toda su vida, en muchas cosas era mas fuerte que el, pero jamas le dijo nada malo, jamas le hablo con algo mas que ternura o hizo sentir menos por que el en realidad era terrible peleandose.

Ella era tan alegre y brillante siempre que estaba fuera de sus peleas, la luz que Shinichiro ni siquiera sabia que necesitaba.

Wakasa les miraba siempre fastidiado cuando estaban juntos, sin poder creer que podian llegar a ser tan cursis, y Nozomi no entendia a todas esas chicas que rechazaron a Shinichiro cuando el era una persona tan maravillosa, y amaba a Shinichiro tanto como el lo hacia con ella.

Se habian conocido cuando Wakasa entro en la pandilla de Shinichiro y la trajo con el, Nozomi sintio que perdia el corazon apenas los ojos de el se posaban sobre los suyos, de pronto sabiendo que era a su lado el unico lugar en el queria estar, y se prometio seguirlo a donde fuera.

Muchas pandillas habian intentado ir contra Shinichiro, nunca alcanzaron a tocarlo, por que Wakasa y Nozomi los hacian caer en un segundo.

En un principio, ella intento ignorar lo que sentia por el, por que sabia que su hermano se molestaria con ella y Shinichiro, pero mientras mas tiempo pasaba cerca de Shinichiro, con el sonriendole con demasiada facilidad y tan suavemente, se dio cuenta que no podria evitar sus sentimientos demasiado tiempo, por que en cada una de ellas se enamoraba mas profundo de el.

Shinichiro a pesar de estar metido entre peleas y pandillas no dejaba de ser la mejor persona que ella habia conocido, siempre llevandola a casa cuando Wakasa se perdia por ahi, cuidandola de los que querian pasarse con ella, no sabia pelear, pero la defendia de cualquier manera, Nozomi siempre era la que terminaba la pelea, pero el gesto era tan calido en su corazon, lo hacia latir de nuevo, libre y lleno de vida otra vez.

Su primer beso habia sido bajo la lluvia, habian enfrentado a otra pandilla, se limpio con el dorso de la mano la sangre sobre su labio roto, la lluvia habia comenzado a caer unos segundos antes de que escucharan a la policia acercarse, ella intentando encontrar a Wakasa pero sin conseguirlo, Shinichiro tomando su brazo entre todo el caos de personas huyendo, consiguiendo sus ojos.

-Te llevare a casa.-Le informo, y ella asintio con la cabeza antes de subirse a su moto con el, rodeandole la cintura con los brazos para sostenerse antes de partir, suspirando al sentir su cuerpo contra el suyo, como queria que estuviera siempre, ambos haciendo el esfuerzo de controlar sus latidos acelerados, llegaron tras unos minutos, Shinichiro teniendo especial cuidado con la lluvia por que estaba con ella y no queria que le ocurriera nada.

Llego a la puerta de su casa unos minutos despues, y Nozomi le sonrio agradecida.

-Gracias por traerme de vuelta, no se donde esta Wakasa, espero que bien.-Sono un poco preocupada al decir, haciendo una mueca.

-No tiene importancia, no podia dejarte sola. Tienes que curarte el labio y el corte en la mejilla, siguen sangrando.-Le miro con preocupacion, rozando sus labios con los dedos antes de saber lo que estaba haciendo, Nozomi le miro pasmada, incapaz de moverse al sentir el roce sobre ellos, tan suave que ni siquiera dolia, cuando sintio su respiracion rozar sus dedos frios Shinichiro pareciendo darse cuenta, aparto la mano rapidamente y ella solo quiso llevarla de vuelta a su labios, una sonrisa deslizandose en sus labios cuando le vio enrojecer avergonzado.-Yo, lo, lo siento.