The Babysitter's Club || Chanbaek

The Babysitter's Club

Chanyeol regresó a la ciudad, llevó a LuHan a su casa aunque no hablaron en el camino.  Nunca antes lo habían hecho, y Chanyeol creía que en ese momento el chico se encontraba muy sensible como para entablar una conversación.

Un viaje silencioso en donde solo se oía la música de la radio, los hipidos de LuHan, y las respiraciones pesadas de Chanyeol. Tenían mucho que pensar.
Cuando LuHan bajó y fue abrazado por un chico más alto, Chanyeol entendió por qué LuHan ya no quería seguir en el negocio, y también entendió lo que BaekHyun quería.

El chico de cabello negro sobaba la espalda de LuHan, susurrándole al oído, besando su cabeza y limpiándole las lágrimas, quitándose la chamarra para ponerlo sobre su cuerpo, no tenía duda de la calidez y seguridad que sentía LuHan en esos momentos. Y eso quería brindarle a BaekHyun, amor.

Fue un camino, con muchos pensamientos, pero estaba seguro de lo que debía hacer. Por eso, al llegar a casa, encontró a su esposa en la recámara y sin dudarlo soltó.

—Quiero el divorcio.

Yuna seguía en la cama, comprando por internet como cualquier otro día, con un camisón de seda blanco y flores azules, con su cabello recogido en un moño. Parecía una esposa de película.

—¿Ni un beso de bienvenida? ¿Qué te pasa?

—Quiero el divorcio Yuna, ya no te amo, no te he amado desde hace bastante tiempo, no quiero seguir engañándote.

—¿Engañándome?

—Yuna te soy infiel—su esposa cerró la laptop con lentitud, la puso a un lado y suspiro. —Lo siento, se que estuvo mal pero yo...

—¿Quién es?

—¿Qué?

—¿Quién es? ¿La conozco? ¿Es bonita?

—¿Vas a preocuparte por eso en lugar de lo que te estoy pidiendo?

—Ya me conoces Chanyeol, ¿Que quieres que diga? Es solo una aventura, tú jamás vas a dejarme.

—¿Por qué estás segura de eso?

—Por que te conozco, debe ser una aventura y ya, eres un hombre de familia y no dejarías a tus hijos. Se que te metiste con alguien por que yo no accedía contigo, es normal, supongo.

—Estoy enamorado de esta persona. Amo a mis hijos y a ti, no lo negaré, te quiero por todo lo que hemos vivido juntos, pero ya no te amo, no te veo más a mi lado, no quiero seguir con esto y tampoco quiero que vivas así, mereces ser feliz con alguien más.

—¿Esto es por las compras?

—No es por las compras Yuna, escúchame. Ya no quiero seguir contigo, quiero el divorcio.

—¿La conozco?

—Es un hombre—suspiro desesperado, cansado de las evasivas de su esposa.—Amo a un hombre.

—Me estás jodiendo—Lo siguiente que escuchó fue el estallido del espejo de la habitación, Yuna había lanzado el portátil hacia él.— ¿Me estás cambiando por un hombre? ¡Un hombre, Chanyeol!

—No te hagas la sorprendida que bien sabías de mi sexualidad. Sabias que me gustan los dos géneros.

—Jamás te daré el divorcio.

—Yuna.

—¡No! —grito parada sobre la cama, para verse más alta e intimidante.— Si fuera una chica te lo daría ¿pero un hombre? ¿Te imaginas lo que dirán de mí? No dejaré que hablen de mí, "oh mírala ahí la que el marido la dejó por hombre" ¡jamás!