1-Báilalo o cántalo kids

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Báilalo o cántalo kids

Roxxy años atrás...

Mi madre me dijo que podía venir al concurso si sacaba buenas calificaciones cosa que no sucedió. Pero aquí me encuentro junto con mi papá, ella está en el trabajo y él decidió tomarse el día y traerme para que no siguiera llorando. Y no, no es berrinche, sino que me dijo que por una calificación mala y que afectaba el trato con mi madre no debía importar porque vio cuánto esfuerzo ponía de mi parte.

—Roxxane Rosemary Fox, participante número 10— mi padre observa el papel que tiene en su mano antes de acercarse con el muchacho que me habló.

—Buenas tardes joven, soy el padre de Rose. Es la concursante 10—

Mi papá me señala y el joven me da un vistazo

—Síganme—

Entramos por una puerta metálica rojiza. Caminamos por varios pasillos como si fueran laberintos hasta llegar a un cuarto en el que personas pasaban con carritos móviles en donde había ropa colgada. Una niña con un tul rosa pasó corriendo mientras una señora con una peluca en la mano trataba de alcanzarla.

—Cuando el presentador te mencione saldrás y harás lo que dijiste qué harías en la hoja, tiene diez minutos para prepararse en la sala de allá—

señala los muebles en donde estaban sentados otros niños con sus papás.

Mi papá me agarró de la mano para caminar hacia allá, y una vez llegamos él saludó a todos con un cordial "Buenos días", jaló de mi mano y repetí el saludo. Es algo que siempre pasa, soy algo distraída y al mismo tiempo no me gusta hablar con personas desconocidas porque dan la impresión de que no quieren escuchar a una niña de ocho años.

Ambos nos sentamos en el sillón de dos plazas, mi piernita comienza a temblar, pongo mi mano en mi trenza derecha. La manía que tengo de agarrar mi cabello cuando estoy nerviosa heredada de mi madre.

—¿Es tu hermanita? — una de las señoras le pregunta a mi padre, este se pone nervioso y yo me quiero reír. Es la pregunta que siempre les hacen a mis padres cada que salimos.

Ellos se casaron algo jóvenes y al mes de regresar de su luna de miel se enteraron de que vendría en camino, nací cuando mi padre cumplió veintidós para ser exacta un día después de su cumpleaños nací, mi madre tenía veintiún años cuando salí de su panza porque sí, me explicaron que los bebés no venían de la cigüeña o del polo norte como me hizo creer mi tía Daiana.

—No, ella es mi hija Rose—

—Bonito nombre ¿Y su mamá por qué no vino? —

Mi papá carraspeó, se me quedó viendo y me guiñó el ojo.

—Su madre está de viaje—

¿Por qué él miente?

¿Por qué la señora puso una sonrisa como la del gato de Cheshire?

—¿Regresará pronto? —

—Sí, hoy en la tarde—

La sonrisa de la señora que parecía del gato de Cheshire se congeló, solté una risita y mi papá me jaló un mechón de mi trenza, no fue duró. Esa era su señal disimulada para que no me riera en momentos como estos.

La señora no dijo nada más, mi papá vio que mi pierna no dejaba de temblar y la posición de mi mano.

—Rose, no estés nerviosa. Lo harás excelente hija, sé que lo harás de maravilla.

—¿Y si me caigo?

—Te levantas y sigues como si nada.

—Tengo mucha pena.

RoxxyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora